Ali Mohamed, técnico del Torreblanca Melilla CF, valora para El Faro lo que ha sido la temporada del conjunto albinegro en su primera experiencia en categoría nacional. No ha sido nada fácil tal y como manifiesta el preparador melillense, pero salvando los contratiempos surgidos al inicio del campeonato que marcaron de alguna manera el devenir del equipo en la competición, la experiencia ha sido más que positiva tanto a nivel colectivo como individual.
Atrás queda ya la clasificación del equipo en su debut en Liga Nacional Juvenil y toca valorar lo realizado por el equipo a lo largo del ejercicio que está a punto de concluir de manera oficial.
“La verdad es que a pesar de los altibajos que hemos tenido a lo largo del curso, es justo reconocer que el equipo ha ido de menos a más. Del mismo modo tengo que aceptar que la inexperiencia tanto mía como de mi compañero Sufian en la categoría ha podido pesar sobre todo al principio, pero con el paso de las jornadas todos -jugadores y técnicos- nos hemos ido adaptando a las exigencias de la competición”, significó Ali.
“No ha sido fácil, sobre todo cuando eres debutante en la categoría, pero en líneas generales puedo decir que estoy contento con el esfuerzo que ha realizado los chicos, más aún en la recta final del campeonato, porque a pesar de lo mal que estábamos me he sentido me he sentido respaldado por ellos”, añadió el preparador melillense.
En cuanto a lo realizado en la competición, el entrenador albinegro declaró que “empezamos con muy mal pie, porque sucedieron cosas internas en el vestuario que no se las desearía a nadie. Tuvimos unos conflictos al comienzo de la temporada y a raíz de esos hechos la verdad es que el equipo sufrió bastante ya que tuvieron repercusión en cuanto a la unión del grupo”, manifestó.
“A nivel colectivo los chavales han ido creciendo con el paso de la competición. La mayoría de los jugadores son de primer año y al final se ha notado la progresión y la evolución tanto en el aspecto físico como mental”, aseguró Ali Mohamed.
“Me quedo con un detalle importate y es que la mayoría de los jugadores no perdieron la confianza a pesar de los malos resultados. Los que me conocen desde hace mucho tiempo saben que no me rindo y ellos se han contagiado de eso”, indicó.
“Hemos intentado disfrutar de la experiencia con todo lo que conlleva competir durante tantos meses viajar y demás. Algunos jugadores no han tenido el compromiso que se requiere para afrontar una competición tan larga, pero afortunadamente han sido los menos”, valoró. En cuanto a no haber logrado el objetivo inicial de la permanencia teníamos claro que para ello nos tenía que respetar el tema de las lesiones, cosa que no ocurrió. De hecho se nos lesionó uno de nuestros jugadores más determinante de cara al gol como es Zaki. A ello habría que añadir el descubrimiento de la polivalencia de algunos jugadores, que destacaron más en los puestos que acabaron cubriendo que en los iniciales. Aunque lo más importante para mí es que a pesar de los resultados nunca hemos perdido la alegría con la que se debe afrontar la vida y con eso me quedo”, expresó Ali. A nivel individual el técnico melillense valora su paso por categoría nacional como una experiencia muy valiosa. “A nivel individual me quedaría con que he aprendido muchísimo tanto de los jugadores como de los rivales. En ese aspecto estoy muy agradecido a los chicos. A pesar de los resultados he aprendido muchísimo y por ello siempre les estaré agradecido. También al club por la confianza que ha depositado en mí en cuanto a dejarme organizar el equipo desde hace unos cuantos años”, añadió el entrenador del cuadro albinegro, quien insistió en el agradecimiento a Rafa Torreblanca por apostar por él así como a su ayudante Sufian por todo lo que ha aportado al equipo. En cuanto a su futuro, el preparador melillense comentó que “en estos momentos estamos inmersos en la competición de fútbol playa. Y en cuanto acabe quiero descansar antes de tomar cualquier decisión”.