Melilla UTE (unión de las empresas de limpieza FCC y Urbaser) y sus trabajadores firmaron ayer al mediodía un esperado preacuerdo. Éste incluirá de manera indefinida y a tiempo completo en la empresa a 23 de sus actuales empleados, que hasta la fecha se encontradan “en fraude de ley”, como había catalogado la Inspección de trabajo estas contrataciones de Urbaser.
Ahora, y tras una última intervención personal del responsable de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, la empresa convocó ayer a las 11:30 horas a los representantes de los empleados en una reunión, para así transmitirles lo pactado con el consejero e intentar acercar posturas en un cónclave que marcó el principio del acuerdo.
Contratos indefinidos
Todo esto venía, según recordó el presidente del Comité de Empresa de FCC-Urbaser de CCOO, Francisco Machado, a raíz de que la empresa había negado reiteradamente su plaza indefinida a 16 trabajadores como recoge la ley. Estos operarios habían permanecido más de tres años ininterrumpidos en la compañía y, por convenio, les correspondía un puesto fijo.
En vez de ésto, les ofrecieron una plaza indefinida pero a media jornada, lo que obligó a la Inspección de Trabajo a sancionar a la empresa en dos ocasiones: la primera en febrero y con unos 6.000 euros de multa, y en abril por el doble de esta cuantía al negar este mismo derecho a dos nuevos trabajadores que alcanzaron los tres años empleados en la sociedad.
Otro de los objetivos alcanzados en la reunión entre los representantes de los trabajadores y de Urbaser ha sido “arañar el compromiso de permanencia de otros cuarenta compañeros que se veían con un pie en la calle al reunir las mismas condiciones que los trabajadores de la entidad a los que, primeramente, se les había negado su legítimo derecho”, como expresó el agente social.
Así pues, y como admitió Machado, la alegría es doble, y aunque este acuerdo está a la espera de la celebración de una reunión con el consejero de Medio Ambiente hoy mismo y otra con los trabajadores de la empresa, el sindicalista se muestra satisfecho por la consecución de un preacuerdo “beneficioso” para los empleados, especialmente teniendo en cuenta “la delicada situación económica en la que se halla el país actualmente”.
“Paz social”
Como el convenio actual se había firmado en marzo de 2015 y tiene una vigencia de tres años, desde el Comité de Empresa se ha optado por adquirir una postura menos beligerante, evitando acudir a la Inspección de Trabajo para así salvaguardar el compromiso adquirido.
Todos estos puntos del preacuerdo se consultarán a los empleados de Urbaser este sábado en dos sesiones, una a las 12:00 del mediodía y otra a las 18:00 horas de la tarde, aunque Paco Machado considera que los trabajadores aceptarán de buena gana las consecuciones de este pacto, “pues hay que contextualizarlo todo y aceptar la realidad económica que rodea a esta situación”.
Esfuerzo conjunto
Paco Machado, quiso acabar alabando la manera en la que se ha gestionado esta negociación entre su sindicato (CCOO) y UGT, ya que “han dejado de lado las diferencias entre ambos para, de una manera eficaz y en favor de los trabajadores, aunar esfuerzos para conseguir este preacuerdo”. Quiso agradecer además el trabajo de Araceli Navarro, enlace ugetista, pues aunque ayer no pudo estar en la reunión, “ha estado presente en todas las fases de reivindicación y negociación entre las partes implicadas”.
La Ciudad, satisfecha con este acuerdo
El consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, mostró ayer su satisfacción por la firma del preacuerdo de convenio colectivo entre los trabajadores de la empresa “Melilla UTE-FCC-Urbaser”. Como reconoció a El Faro, él mismo se puso en contacto con esta unión temporal de empresas de limpieza para solucionar una situación que tenía en “fraude de ley” a dieciséis trabajadores de la compañía, como reconocieron varias inspecciones de trabajo, y que mantenía con su puesto en el aire a más de cuarenta empleados.
“Queremos expresar nuestra satisfacción porque se evidencia que la labor de mediación realizada por el Gobierno de la Ciudad, de una forma discreta pero constante y determinada en sus planteamientos, ha contribuido a conseguir este importante acuerdo”, señaló Quevedo.
Ahora, con todo previsiblemente solucionado, la Consejería de Medio Ambiente felicita tanto al Comité de Empresa, representante de los trabajadores, como a los mismos representantes de la entidad, “por haber sido capaces de realizar este importante acercamiento de posturas, tan distantes hace solo unos días.
Considera el consejero que el hecho de que exista un preacuerdo de Convenio con tres años de duración desde abril de 2015 (fecha desde la que no estaba vigente el anterior) hasta abril de 2018, garantiza un adecuado clima laboral entre empresa y trabajadores en los casi dos años que restan hasta la finalización del contrato, lo que sin duda contribuirá a la mejora de la limpieza de la Ciudad, que se sumará a los efectos positivos de la implantación del GIS (sistema de geolocalización) que ya se vienen observando.