Los pagos a las empresas que presten algún servicio a la Ciudad se llevarán a cabo en el plazo máximo de 30 días l Conesa cree que “habrá problemas al principio”. El Registro Único de Facturas de la Ciudad Autónoma será una realidad a finales del presente mes. El Consejo de Gobierno aprobó en la jornada de ayer el reglamento de organización y funcionamiento de dicha herramienta. Una vez entre en vigor con su publicación en el Boletín Oficial de Melilla (BOME), algo que ocurrirá en el plazo aproximado de veinte días, el Registro Único estará listo para usarse.
El consejero de Economía y portavoz del Ejecutivo local, Daniel Conesa, recordó que todas las empresas que suministren bienes y servicios a la Ciudad Autónoma deberán presentar sus recibos ante dicho organismo, cuyas instalaciones estarán localizadas en las dependencias de la Consejería, ubicada en el antiguo hospital de la Cruz Roja.
En declaraciones realizadas a los medios de comunicación, Conesa explicó que gracias a la puesta en marcha de esta iniciativa los proveedores de la Ciudad Autónoma podrán conocer en todo momento en qué situación de trámite se encuentran sus facturas y darles la seguridad de que el pago de las mismas se realizará en los treinta días que marca la normativa, siempre y cuando los recibos no tengan que devolverse por algún defecto de forma.
“Una vez presentada en el Registro Único comienza a contar el tiempo”, señaló el consejero. “La administración local tiene la obligación de liquidar el pago en treinta días y, de no ser así, la empresa afectada podrá devengar sus intereses de demora si así lo desea”, subrayó Conesa.
En este sentido, remarcó que el compromiso de la Ciudad Autónoma es pagar siempre dentro de plazo, aunque en algunas ocasiones “es prácticamente imposible”. Además, insistió en que si la factura se devuelve por cualquier motivo, el tiempo de gestión se paraliza hasta que vuelva a ser remitida al Registro Único.
Asimismo, reseñó que si un recibo se presenta en otro de los registros disponibles en la administración local no se rechazará, sino que se remitirá al Único. En cualquier caso, no empezará a contar el plazo para su pago hasta que llegue a esta último organismo. “Es un procedimiento que conllevará un esfuerzo importante de gestión”, admitió el consejero. Por otro lado, subrayó que los instrumentos informativos se irán implantando de manera progresiva y que al principio se detectarán “algunos problemas”.
“Facilitaremos al proveedor toda la información sobre cómo está siendo tramitado su recibo. Habilitaremos unos perfiles informáticos para que puedan hacerlo por vía telemática”, agregó.
Campaña informativa
En los próximos días, el área de Economía iniciará una campaña para informar a todas las empresas que prestan servicio a la Ciudad Autónoma de las novedades en el pago de facturas.
También se prevé que en un futuro próximo los proveedores estarán obligados a presentar sus extractos ante el Registro Único para evitar contratiempos. “La mecánica será muy sencilla. Una vez presentada la factura, será el nuevo organismo el que la remita a los distintos centros de gastos, consejerías u organismos autónomos para que la validen y se pueda tramitar correctamente”. En palabras de Conesa, este proceso exigirá “una mayor agilidad” para cumplir los plazos.
Recursos humanos
La Consejería de Economía reestructurará sus servicios humanos para que el nuevo registro funcione de manera correcta. Conesa detalló que habrá tres personas al frente de dicho organismo. También confirmó que su creación no conllevará inversión económica alguna por parte del Gobierno local. El Registro estará localizado en la Consejería de Economía, por lo que no necesitará dependencias propias.
Quedan en el aire algunos puntos por determinar, como su horario de funcionamiento. Conesa señaló que estas cuestiones se comunicarán a los empresarios de manera progresiva.
Para finalizar, confirmó que la intención de su Consejería es que en el futuro todos los procesos burocráticos funcionen mediante un registro electrónico, lo cual agilizaría los trámites y propiciaría el ahorro de tiempo y dinero.