La Ciudad está trabajando para rehabilitar los tres fuertes de su cuarto recinto amurallado, dos de los cuales ya han sido terminados, lo que le permitirá recuperar el sistema ‘atenazado’ defensivo completo que tenía en el siglo XVIII y que es único en España.
“Si hay otro, que vengan y nos lo digan, pero nosotros creemos que este es el único sistema defensivo que hay en España que se pueda ver y visitar”, afirmó de manera rotunda el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, tras visitar el Fuerte del Rosario, uno de los tres que conforman el cuarto recinto, que acaba de ser recuperado.
El sistema defensivo ‘atenazado’ de Melilla data del siglo XVIII y está compuesto por fuertes, camino cubierto y galerías subterráneas.
Gran parte ha podido ser ya recuperado con la rehabilitación del Fuerte de Victoria Grande, que terminó en 2015 y ha recibido varios premios, y la del Fuerte del Rosario, que terminó ayer oficialmente con la recepción de las obras por parte de la Ciudad, que ha invertido 424.761 euros, el 65% de ellos financiados con Fondos Feder. En este último, se ha logrado recuperar cuatro bóvedas, la cubierta, el foso y el cuerpo de guardia, entre otras zonas.
Ahora solo queda por completar este objetivo con la rehabilitación del Fuerte de Victoria Chica, que saldrá a adjudicación de manera inminente, después de que el Gobierno central haya abonado a la Ciudad los primeros 800.000 euros de los dos millones que se comprometió a destinar a este proyecto melillense, aunque su coste se eleva a tres millones.
Según los cálculos de Imbroda, dicha obra podría estar finalizada en un año y medio, aproximadamente, de manera que Melilla habrá podido recuperar su conjunto defensivo de tenaza, que permitió a la ciudad resistir como ciudad española entre 1774 y 1775 durante los cien días de sitio al que fue sometida por las tropas del sultán Muley Mohamed.