Melilla regresa a principios del siglo XX en homenaje al Titanic

En colaboración con la Ciudad, el Centro Unesco organiza una exposición y una exhibición de coches de época en la Plaza de las Culturas y el Parque Hernández. Melilla recordará el hundimiento del Titanic, del que se cumple el primer centenario, este fin de semana, gracias a la colaboración de la Ciudad Autónoma y el Centro Unesco de Melilla. Los melillenses están invitados esta tarde a visitar la presentación de los trabajos de investigación que han realizado en los últimos tres meses un grupo de alumnos del IES Leopoldo Queipo sobre la tragedia del buque más grande del mundo, en 1912, que hoy se ha convertido en un fenómeno social y cultural, como así afirmó el responsable del Centro Unesco en Melilla, Juan Antonio Vera. Las Viceconsejerías de Festejos y Participación Ciudadana han colaborado con esta iniciativa, con un coste aproximado de 1.000 euros, sumándose así a otros homenajes que se celebrarán en Valencia y Barcelona así como en otros puntos del planeta como Irlanda y Méjico.
La Sala 120 del Palacio de Exposiciones y Congresos (PEC) acogerá esta tarde, a partir de las 18:30 horas, la exposición de los trabajos de investigación del Titanic, que ha sido dirigido por la profesora Carmen Morillo.
El sábado por la mañana, a partir de las 11:00 horas, los melillenses podrán contemplar la exhibición de coches de la época así como los personajes más relevantes del transatlántico, gracias a la participación de la Asociación Escudería Melilla, dirigida por Ramón Bugallo.
También en colaboración con Capitanía Marítima, se realizará un homenaje a las víctimas del Titanic a bordo del remolcador ‘Remolcanosa’ en el puerto melillense y, posteriormente, se dará un paseo por las calles de Melilla, haciendo parada en la cafetería que homenajea al Titanic en la calle Duquesa de la Victoria.
La comitiva de vehículos clásicos y personajes de la época como el capitán Edward Smith, el pasajero de primera clase, James Carter o la conocida ‘Insumergible’ Molly Brown se trasladarán al Parque Hernández, a partir de las 12:00 horas, donde los melillenses podrán hacerse fotografías de época de manera totalmente gratuita.
Teniendo en cuenta que por el menú de la última cena del Titanic se llegó a pagar 80.000 dólares en una subasta, el Casino Militar ofrecerá el sábado a partir de las 21:30 horas, tres de los diez platos que se sirvieron a bordo del transatlántico horas antes del fatídico choque contra un iceberg. Los platos que aquella noche cocinó el afamado maestro Escofier serán recreados en esta ocasión por Driss Ismael en el Casino Militar. Para poder asistir el requisito indispensable es ir vestido de época. Las plazas son limitadas por lo que habrá que reservarlas en la jornada de hoy.
Al finalizar la cena, se sorteará entre los asistentes varios regalos, como el enviado por Louis Vuitton España S.A., que no es otro que una réplica de las maletas que Molly Brown llevaba a bordo del Titanic.
Para finalizar con el homenaje al hundimiento del famoso transatlántico El Telegrama de Melilla publicará un especial, ya que el diario melillense se hizo eco de la tragedia en su edición del 21 de abril de 1912.