Tres de los fallecidos fueron asesinados con armas blanca. El cuarto fue un bebé recién nacido. Melilla registró el año pasado cuatro homicidios dolosos y asesinatos consumados, según el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior. Tres de ellos fueron víctimas de las armas blancas y el cuarto, un bebé recién nacido.
El primero de los crímenes tuvo lugar el pasado 16 de marzo, en primavera. Un residente del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) falleció a medianoche, víctima de una agresión con arma blanca supuestamente perpetrada por un tunecino.
Según informó en su momento la Unidad Operativa de Policía Judicial de la Guardia Civil, la agresión produjo en el marco de una disputa con otro inmigrante, a la altura del cruce de la carretera de Farhana con el acceso al Cerro de la Palma Santa.
El segundo de los asesinatos ocurrió en verano, el 25 de junio, en la calle Universo, número 5 de La Cañada. Ese día murió un hombre de 48 años víctima de una agresión con arma blanca. La Policía Nacional de Melilla asegura que ha esclarecido el delito.
En octubre pasado (otoño) se registró el tercer homicidio. Un joven de 34 años fue atacado con una catana en la calle Mar Chica del barrio de El Real. Este crimen se sigue investigando.
Por último está, según fuentes policiales, el caso del bebé que fue hallado muerto el día de Navidad (invierno) en una casa de la calle Álvaro de Bazán del ba