El salón ‘El Trébol’, en el recinto deportivo militar La Hípica, acogió ayer el acto de reconocimiento a todos aquellos funcionarios, instituciones, empresas y entidades que trabajan por la reinserción social de los presos de Melilla. El evento coincidió con la celebración del día de Nuestra Señora de la Merced, patrona de las instituciones penitenciarias.
El acto cerró una semana de actividades cuyo fin es ofrecer a los reclusos una serie de condiciones especiales que, en definitiva, favorezcan y agilicen su restitución en la sociedad. En este sentido, Francisco Rebollo, director del centro penitenciario de Melilla, destacaba el efecto positivo que esta clase de acciones tiene en los presos. “Los internos se dividen por módulos y se crea una rivalidad sana y bastante curiosa. Penado quiere ganar a preventivo, preventivo a respeto… Y la verdad es que hay un nivel de competitividad que está muy bien”, declaró Rebollo.
Reconocimiento
En su discurso inicial, el director del centro penitenciario, habló de la “gran responsabilidad” que su institución tiene para con el Estado y explicó los principales métodos de reinserción social que se aplican en ella, destacando la labor de los funcionarios. “Son ellos los que, con su trabajo diario, consiguen que exista un ambiente de convivencia pacífica”, aseguró Rebollo.
Tras sus palabras, se procedió a la entrega de medallas y demás reconocimientos a las personas y entidades que trabajan activamente por la restitución de los presos. En lo que a los propios funcionarios se refiere, David Paniagua Castillo recibió la medalla de plata de instituciones penitenciarias, J.D.P.M. y M.J.M.C. percibieron la de bronce y J.N.G.D., J.C.M.B., J.V.P.S. y J.A.R. sendas menciones honoríficas.
Fuera de la propia institución, la Federación Melillense de Fútbol consiguió la medalla de bronce al mérito social penitenciario, mientras que Darío Gómez (capellán del centro), el imán Meedal El Hillaly y el Grupo Eulen también fueron obsequiados con placas en reconocimiento a su trabajo.
Liberar a un preso
Gregorio Castillo, gestor delegado de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío, intervino tras la entrega de medallas para realizar la tradicional petición de indulto que liberará a un preso en la próxima festividad de Semana Santa.
El presidente de la ciudad autónoma, Juan José Imbroda, cerró el acto felicitando a los trabajadores del centro penitenciario por su labor profesional y humanitaria. “No se os oye y eso quiere decir que las cosas van bien”, sentenció.
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