La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, y la directora provincial del Servicio Público de Empleo en Melilla (SEPE), Rosa López Ochoa, informaron sobre las políticas activas de empleo. Destacaron el incremento importante de presupuesto que hay para su desarrollo, ya que este año contará con 12,6 millones de euros mientras que el año pasado fueron 9 millones de euros, con lo que hay una subida de más de 3 millones.
Esto se traduce no solo en un aumento del presupuesto para los Planes de Empleo de la Ciudad, pues se contará con 5,5 millones, mientras que el pasado año fueron 2,4 millones de euros, sino también en formación, puesto que habrá 3 millones de subvenciones para los centros de formación y entidades que deseen presentar sus proyectos.
Y además hay que sumar entre las políticas activas de empleo los 1,3 millones de euros para las escuela taller.
La delegada del Gobierno argumentó que se ha hecho un análisis de la situación del pasado año y a partir de ahí se han distribuido las partidas en las diferentes políticas de empleo.
Moh destacó que el pasado año hubo una demanda de la Ciudad a la Delegación del Gobierno y al SEPE para aumentar la partida de presupuesto de los Planes de Empleo de la Administración local ya que no se podía llegar a un sector de la población como es el que sufre riesgo de exclusión social. Son personas que tienen una gran dificultad para entrar en el mundo laboral y la Ciudad deseaba contar con una mayor partida para dotar a estas personas de una oportunidad en el mundo del trabajo.
De ahí que la propuesta de la Delegación y del SEPE fuera incrementar de forma “considerable” el presupuesto destinado a ese colectivo y lograr más beneficiarios de los planes de empleo.
Todo este nuevo proyecto se abordará hoy en la reunión de la comisión ejecutiva en la que están las dos administraciones. Ahí es donde se acuerdan los criterios de los planes de empleos.
De esta forma, la delegada del Gobierno remarcó que habrá un 50% del presupuesto de los Planes de Empleo destinado al cupo general y contará con 2,8 millones de euros, por lo que será una dotación presupuestaria mayor que la del 2020, pues había 2,3 millones de euros, aunque al final se dedique solo la mitad del presupuesto de este año.
El otro 50 restante será en un 10% para mujeres víctimas de violencia machista, que no tuvo cabida en el plan de empleo del pasado año de la Ciudad, y un 40% para colectivos vulnerables.
Al margen de esto siempre habrá plazas y cupos específicos para personas con discapacidad funcional, reiteró Moh.
Ésta será la propuesta de la Delegación para la Ciudad y resaltó el compromiso del Gobierno central para dar una respuesta a las personas que se encuentran en una situación complicada para lograr un empleo.
Por su parte, la directora provincial del Servicio Público de Empleo indicó que durante los años pasado fue complicado porque no se contaba con presupuestos propios y al contar con los del Gobierno del PP de 2018 fue “imposible” sacar adelante algunas políticas de empleo. No obstante, celebró que ya se cuente con los nuevos presupuestos y contar con las partidas a tiempo para cada ministerio. Por ello, indicó que todas las políticas activas de empleo contarán con una aportación estatal de 12.657.085 euros.
López Ochoa comentó que vienen a incentivar el empleo, la formación y el fomento del empleo autónomo, así como de las contrataciones indefinidas de personas con discapacidad funcional, y los centros de empleo.
La directora del SEPE comentó que gran parte de la partida va para los Planes de Empleo de la Ciudad con 5.493.885 euros, frente a los 2,4 millones que recibió en 2020. “Se ha hecho un esfuerzo por más que duplicar la cantidad dadas las especiales circunstancias en las que está la ciudad, como el cierre de la frontera, la falta de cualificación y de experiencia laboral de gran parte de los parados”, añadió.
Las cantidades de este partida se distribuirán en un 50% para la reserva de cupo general y el resto del 50% será para los colectivos señalados antes, aunque ya se han iniciado los trámites y se negociará con la Ciudad.
Por otro lado, López Ochoa informó de que ya se ha iniciado el trámite de talleres de empleo y escuelas taller. Explicó que la convocatoria está iniciada por 1.337.116 euros para ambas.
En este sentido, remarcó que hay una necesidad de cualificación de personas que están inscritas como demandantes de empleo en la ciudad. Cada tipo de curso se dirige a una población de edad diferente, ya que una de ellas es para menores de 25 años y la otra para los que superan esta edad. Además, los alumnos que acuden a estos cursos reciben una beca que está a cargo del SEPE.
La convocatoria de los talleres y de las escuelas está a punto de salir y las diferentes entidades podrán acudir a ellas en concurrencia competitiva para quedarse con estos proyectos.
Otro de los temas que abordó López Ochoa son los 3 millones de euros que hay destinados para formación este año.
La directora del SEPE remarcó que han mantenido varias reuniones con los centros de formación de la ciudad y también con los empresarios en estos últimos meses. En estos encuentros se manifestó a la Administración General del Estado la necesidad de formar a los desempleados de la ciudad en determinadas profesiones que son demandadas por las empresas.
“Esta sensibilidad ha sido recogida por el SEPE y por la Delegación y, teniendo en cuenta que los presupuestos de 2020 no permitieron por el tiempo sacar dicha convocatoria la gestión que se ha hecho es aumentar el importe del total de la convocatoria para este año”, subrayó.
López Ochoa indicó que en estos cursos no están incluidas las certificaciones de profesionalidad, sino que saldrá una convocatoria con concurrencia competitiva a la que podrán presentarse todas las entidades y empresas que lo deseen con sus propios proyectos de formación para parados.
La directora del SEPE indicó que esta entidad no será la encargada de marcar de qué serán los cursos, sino que son las empresas e instituciones que se presenten a esta concurrencia competitiva serán las que faciliten qué programas se van a seguir.
Por todo ello, aseveró que el Servicio de Empleo plantea unas bases, pero subrayó que son muy generales con el objetivo de que se puedan plantear proyectos de formación que encajen con la demanda de las empresas locales o de las necesidades que hayan detectado las empresas de formación de nuestra ciudad.
Por otro lado, López Ochoa comentó que el Servicio Público de Empleo ya no gestiona la certificación profesional, sino que desde este año es el Ministerio de Educación y Formación Profesional el que lleva esta competencia.
Por ello, dijo que a la convocatoria de formación en general hay que sumar la que saque más tarde el Ministerio de Educación para facilitar a los desempleados las certificaciones profesionales de sus experiencias.
Por último, remarcó que con todas estas partidas presupuestarias se incrementará la oferta de formación para los ciudadanos que están en desempleo en Melilla.
La directora provincial del Servicio Público de Empleo de Melilla, Rosa López Ochoa, informó de las diferentes partidas de prestaciones que se han destinado desde esta institución a la ciudad. En concreto, son 32.816.600 euros los que se han recibido por parte de muchas personas desde abril de 2020 a marzo de este año.
En este sentido, subrayó que la pandemia llego hace algo más de un año y la declaración de alarma ha tenido una serie de consecuencias económicas más allá de la crisis sanitaria que ha provocado la Covid-19.
Fue en abril cuando se inició el pago de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE). De hecho, de los 32,8 millones de euros de prestaciones del SEPE, se han destinado un total de 13.320.863 euros solo en este año para la ciudad en prestaciones de ERTE.
Un total de 3.718 personas han recibido una prestación por encontrase en un expediente de regulación de temporal de empleo desde el pasado año a la actualidad y hoy en día aún hay 944 en esta situación. En algunos casos, la prestación cubre la jornada de forma total al no estar incorporados al trabajo, y en otros casos es de forma parcial.
López Ochoa remarcó que se puede ver la evolución de la pandemia en estas cifras de beneficiarios de ERTE, pues se pasó de 1.318 personas en abril a 3.160 en mayo del pasado año. El incremento y el descenso de estos números a lo largo de los meses permite indentificarlos también con las diferentes etapas de los contagios de Covid-19 y los cierres decretados desde las autoridades sanitarias.
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