Así lo adelantó ayer el presidente de la Ciudad en declaraciones a ‘El Faro de Melilla’.
Melilla cumplirá con los compromisos de austeridad y déficit cero para 2012 solicitados por Mariano Rajoy para el próximo año, en la reunión que el presidente electo tras la generales del pasado 20 de noviembre, mantuvo ayer en Madrid con los presidentes autonómicos de su partido.
En tal sentido y aunque aún faltan por conocerse las estimaciones de ingresos del Estado para el próximo año y por tanto las aportaciones que la Administración central hará a los Presupuestos de la Ciudad Autónoma, lo que sí ya es una decisión tomada por parte del Gobierno de Juan José Imbroda es que en 2012 se huirá de la petición de nuevos créditos bancarios. “Las administraciones -señaló la primera autoridad local- deben huir de la financiación ajena”. De ahí, que Melilla no se plantee incluir ninguna petición de crédito para el próximo año, a diferencia de lo que hizo para 2011, en que previó préstamos por valor de 22,8 millones para un capítulo de inversiones dotado con un total de 45.
“Los créditos que hemos pedido este año han sido para inversiones, no para gastos corriente, pero en aras a cumplir con el déficit cero para el año venidero, no se incluirá ninguna nueva petición de crédito en los Presupuestos de la Ciudad para 2012”.
Imbroda recordó que el crédito reciente aprobado con los únicos votos del PP en el seno de la Asamblea, por un montante aproximado a los 8 millones, ya estaba previsto en los Presupuestos Generales de la Ciudad para 2011 y “podríamos haberlo pedido en enero, pero como la capacidad financiera de la Ciudad está en orden, no lo hemos solicitado hasta final de año. Si hubiéramos estado apretados y en malas condiciones, el segundo día de enero ya lo tendríamos que haber pedido. Con el principio de caja única, ese dinero ya se ha ido invirtiendo y ahora sólo se solicita el crédito para cuadrar el presupuesto”.
De hecho, la petición del crédito último completa a otra anterior, por valor de 15 millones, que aprobó el Consejo de Gobierno de la Ciudad en julio pasado y que en conjunto suman los casi 23 millones de financiación bancaria incluidos en los presupuestos de 2011 para inversiones.
Año de estrecheces
Imbroda reconoce que el horizonte para el año venidero es de estrecheces, sobre todo también porque se recortan notablemente las aportaciones que deben llegar de la UE, con cargo al septenio en curso 2007-2013, que ya vio reducido su montante de ayudas europeas para Melilla a consecuencia de la pérdida de nuestra consideración como Objetivo 1 o región merecedora de ayudas con carácter preferencial.
Sin embargo, Melilla aspira a verse reconocida nuevamente como tal, no dentro de la misma categoría, pero sí con un trato similar al de las regiones ultraperiféricas, tal cual recogió el PP en su programa electoral nacional para las generales pasadas y en el que se comprometía a trabajar ante la UE para que se nos reconocieran nuestras especificidades y se aplicara por tanto una política de ayudas coherente con nuestras especiales necesidades y circunstancias.
Los presupuestos más austeros de la democracia
Melilla deberá elaborar para 2012 los presupuestos más austeros de su historia. Ya el año pasado, y por primera vez en nuestra actual etapa democrática, se realizó una previsión presupuestaria para el presente año por una cuantía menor que la del año anterior. En total se elaboraron con una rebaja de 3,66%, situándose el montante total de los presupuestos consolidados, es decir, incluyendo los de las sociedades públicas, en 254.388.000 euros.
La bajada ascendió en concreto a 8,5 millones respecto a los de 2010, según alegó el Gobierno local, en gran medida por la rebaja en las aportaciones estatales para la atención a menores extranjeros, la disminución también en 4,6 millones en las aportaciones con cargo al Fondo de Compensación Interterritorial (FCI), y la bajada añadida en la recepción de fondos europeos.
La disminución incidió en una disminución de 2,8 millones en el capítulo de personal o sueldos a funcionarios, ya rebajados por decreto del Gobierno Zapatero; y en un millón menos para Bienestar Social, a pesar de la rebaja de 2,5 millones en los fondos de aportación estatal para atención a menores.
Igualmente se rebajó el capítulo de inversiones, que pasó de los 55 millones de 2010 a 46,1 millones, con el añadido de 14 millones para la construcción de un aparcamiento subterráneo a través de EMVISMESA.
En cambio, subieron las partidas de Economía, con un 44 por ciento más, y la de Educación, en un 13 por ciento.
Los presupuestos del presente 2011 se aprobaron en Pleno provisionalmente, con los votos en contra de PSOE y CpM, el 17 de diciembre del pasado año y, un mes más tarde, es decir el pasado enero, lo hicieron de forma automática y definitiva, al no presentarse ningún tipo de alegaciones por parte de particulares.
La carga financiera que soportaba Melilla a primeros de este año era de un 8,8%, muy alejada del 0,75% del PIB admitido para las Administraciones Públicas como límite máximo de endeudamiento.