No falla. Siempre que publicamos una noticia sobre ofertas de cursos de formación para trabajadores en paro o en activo, se convierte en la información más leída del día. A veces, de la semana.
Hay demanda en Melilla para actividades formativas porque la gente, sobre todo, los jóvenes, ven que eso les ayuda a encontrar trabajo.
Estamos convencidos de que será mayor la empleabilidad en la medida en que los cursos respondan a las necesidades de las empresas de la ciudad. Es inadmisible que tengamos demanda de empleo en las panaderías de Melilla y que no haya trabajadores capacitados para trabajar en ellas.
Quizás por este motivo fue recibida con muy buena prensa la propuesta del Plan Estratégico Integral de montar en Melilla un Campus de FP del que aún no sabemos nada.
La semana pasada, el Congreso aprobó los Presupuestos Generales del Estado, que ahora deberán debatirse en el Senado. Hasta donde sabemos, no hay noticias de que existan partidas extraordinarias como las prometidas en los Planes Estratégicos de las dos ciudades autónomas.
Así que estamos a la espera de noticias sobre esa lluvia de millones que está por caer en Melilla y que todos estamos esperando como agua de mayo.
Parece una obviedad, pero llevamos tiempo hablando de la necesidad de adaptar la formación de los jóvenes a las necesidades del mercado. En una ciudad como Melilla no tiene mucho sentido formar ingenieros agrícolas porque aquí no hay agricultura; quizás deberíamos aprovechar el boom de la FP para cubrir todas las plazas que tenemos vacantes en la ciudad.
Y en cualquier caso, hay que mimar mucho la formación de estos jóvenes, para que no se den denuncias como las que hemos recibido en El Faro, de alumnos de FP que llevan tres meses sin profesor de una de las asignaturas troncales del curso.
Los alumnos de la Formación Profesional no quieren títulos: quieren conocimientos para ponerse a trabajar cuanto antes.
Llevamos tiempo a la cola de España en formación. Hay que aprovechar el tirón actual porque no hacemos nada si la gente tiene ganas de estudiar y no tiene dónde hacerlo. Si no solucionamos este problema, seguiremos a la cola del país en todo.
Cuantos comienzan los cursos y no los finalizan, en Melilla?
Me gustaría que diera a conocer ese dato en su periódico.
Gracias