En los negocios, el juego o incluso el amor, elegir una estrategia adecuada es clave para el éxito. Ocurre en la vida y en el ajedrez. Pero no basta con poseer una buena táctica, hay que saber ejecutarla con precisión. El ajedrez ayuda a dotar al ser humano de esta habilidad y de otras muchas más. Numerosos estudios han demostrado que aparte de un juego o un deporte, es también una poderosa herramienta para el desarrollo de procesos cognitivos esenciales para el aprendizaje. Ayuda a pensar, tomar decisiones y potenciar la inteligencia emocional.
José Manuel García, Ismael Mohamed, José Francisco Díaz, Miguel Ángel Vázquez, Tarik Boutahar y Aleksander Colovi lo saben bien. Estos seis jóvenes forman parte de la Federación de Ajedrez de Melilla (Peña Barcelonista de Melilla) y participaron hasta el pasado sábado en el Campeonato de España de Ajedrez de segunda división, que este año se ha celebrado en Linares (Jaén).
Mejor resultado
En este encuentro se han disputado el primer puesto un total de 39 equipos. José Manuel García cuenta que el ELO, el método matemático basado en un cálculo estadístico, que determina la habilidad relativa de los jugadores de ajedrez, les colocó en el puesto 34, pero que con “dos victorias, dos empates y tres derrotas” subieron al puesto 27. “Es el mejor resultado que hemos obtenido hasta el momento”, destaca este joven melillense que lleva seis años mostrando sus dotes en este torneo que organiza la Federación Española de Ajedrez.
Cinco de los seis integrantes de la Federación de Melilla son de nuestra ciudad. Aleksander Colovi es macedonio. “Es un gran maestro que fichamos en un campeonato en Cataluña”, dice García.
El melillense tiene 27 años y lleva practicando este deporte desde los seis. “Fue mi padre el que me enseñó a jugar”, señala.
Cuenta que el ajedrez le apasiona y, al igual que para otro deporte, hay que entrenar “continuamente”. “Se nota mucho cuando una persona lleva un tiempo sin jugar”, dice. Explica que además requiere máxima concentración y agilidad mental. “Uno siempre tiene que estar pensando por qué mi adversario ha hecho determinada jugada, qué puedo hacer y cómo voy a responder”, asegura.
Por tanto, ayuda a tomar decisiones en poco tiempo, olvidando el azar y entendiendo que toda acción tiene una reacción. “El ajedrez no es como las cartas donde te pueden tocar unas u otras. Nada es cuestión de suerte y ambos jugadores siempre parten del mismo punto”, asevera.
En definitiva, el ajedrez no entiende de sexo ni de edades y en el juego reina una máxima vital: las figuras blancas y negras siempre están en igualdad de condiciones.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…