Los delitos se redujeron en los primeros nueve meses de 2012 un 4,7% respecto al mismo periodo del año pasado. Los hurtos fueron la infracción más habitual.
Melilla fue la segunda región en la que más descendió la criminalidad durante los primeros nueve meses de este año. En concreto, los delitos y faltas se redujeron un 4,7% respecto al mismo periodo del año pasado. Sólo en Aragón, donde este índice bajó un 7,7%, se registró una reducción más elevada de la criminalidad, según los datos dados a conocer ayer por el Ministerio del Interior.
De acuerdo con este informe, según el tipo de delito, la mayor reducción se dio en los robos con fuerza, que fueron un 26,1% menos que en 2011. En concreto, se pasó de 587 en los primeros nueve meses del año pasado, a 434 en el mismo periodo de 2012. También se registraron importantes bajadas en la sustracción de vehículos, con un 22% menos (pasando de 173 a 135) y en el tráfico de drogas, con un descenso del 21,5% (se pasó de 158 a 124).
Sin embargo, en el caso de los homicidios, mientras que en los primeros nueve meses del pasado año no se produjo ninguno, este año fueron dos los asesinatos que registró la Policía Nacional o la Guardia Civil en la ciudad autónoma.
Asimismo, hubo otras infracciones en las que también hubo un aumento en comparación con el año pasado. En el caso de los robos con violencia e intimidación, el subida fue del 2,9%, pasando de 171 a 176. Los hurtos también crecieron, en este caso en un 7,6%, de los 863 de 2011, a los 929 de los primeros nueve meses de este año.
Si se compara la criminalidad registrada en Melilla con la media nacional, la bajada es bastante más alta en la ciudad autónoma, ya que en España este descenso se quedó en un 1,6%. En cuanto al tipo de delitos en los que se produjo más reducción, hay bastantes diferencias. Así, mientras que a nivel nacional el mayor aumento se produjo en los robos con fuerza en domicilios, con un incremento del 24,5%, en el caso de Melilla hubo un descenso del 1,5% en esta tipología.
En cuanto al mayor descenso en crímenes de la media española, éste se dio en homicidios y asesinatos, con una bajada del 9,4% (se pasó de 299 a 271). Mientras que en Melilla fue ahí precisamente donde se registró un mayor aumento.