El urbanista José Luis Cañavate afirma que el Plan de Movilidad redibujará la ciudad y que los melillenses tendrán que aprender a usar las calles de un modo “solidario”. El urbanista José Luis Cañavate, que ha iniciado hace unas semanas el diagnóstico de la movilidad en Melilla, afirmó que uno de los pilares básicos para el desarrollo del futuro Plan de Movilidad es la revisión “profunda y contundente” del sistema de transporte público. Así se lo expuso al presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, en la reunión que ayer mantuvieron en Presidencia con la asistencia de los consejeros de Fomento, Medio Ambiente y Seguridad Ciudadana.
Cañavate anunció que en unos cuatro meses se realizará el diagnóstico de la movilidad en Melilla y para el mes de abril del próximo año presentarán unos bocetos del modelo de una ciudad de movilidad sostenible. En estos borradores se incluirán nuevos modelos de transporte público y una reorganización de la ciudad bajo un patrón que vuelva a los barrios como unidad de medida. El urbanista explicó que todos los barrios de la ciudad estarán interconectados entre sí y con el centro de la ciudad gracias a ese nuevo sistema de transporte público. En estos planteamientos no se dejará de lado el uso del vehículo privado, pero sí será necesario redistribuir los espacios para que la ciudad sea más peatonal, según opinó Cañavate, teniendo en cuenta las experiencias ya vividas en otras ciudades españolas como Sevilla, Granada o Málaga. El peatón debe recuperar el espacio público perdido sin que ello suponga un perjuicio para la que reorganización de la vía pública sea compatible con el transporte público, el vehículo privado y las bicicletas.
Una Melilla de movilidad sostenible deberá ofrecer a los ciudadanos todas las opciones de transporte desde cualquier punto de la ciudad, pero Cañavate subrayó la importancia de que “los melillenses aprendan a utilizar la ciudad de un modo equilibrado y solidario”.