Melilla y Ceuta pedirán al Gobierno central que tenga en cuenta aspectos singulares como la densidad de población o la inmigración y el esfuerzo que deben realizar las dos ciudades autónomas en la prestación de servicios al llevar a cabo la reforma de la financiación autonómica.
Los presidentes de Ceuta, Juan Jesús Vivas, y Melilla, Juan José Imbroda, han mantenido hoy una reunión de trabajo en Málaga para concretar los asuntos que plantearán conjuntamente al Estado, un encuentro al que también ha asistido el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz.
Vivas ha explicado en rueda de prensa que en Melilla y Ceuta se dan factores que "condicionan" la capacidad de prestar unos servicios públicos en unos niveles de calidad equiparables a los del resto de España y unos condicionantes "que no tienen parangón" para el desarrollo económico y la creación de empleo.
Además de ser las dos únicas fronteras terrestres de Europa en África, son dos ciudades extrapeninsulares, con una alta densidad de población y escasez de recursos naturales, dificultades por las que exigen que haya un "esfuerzo adicional" por parte del Estado.
Los presidentes de Melilla y Ceuta han acordado intercambiar datos y metodologías para "ir con una voz única y común" a la negociación sobre la reforma de la financiación autonómica.
Para ello, pretenden analizar los presupuestos para distinguir qué corresponde a servicios locales, autonómicos o concertados con el Estado y si existe un déficit en los últimos, una radiografía que esperan tener en un plazo máximo de quince días.
Ha expresado su esperanza de que la reforma del sistema de financiación va a estar dirigido por un gobierno "muy sensible" a la solidaridad e igualdad entre los españoles, y ha confiado en que esta sensibilidad "encuentre la comprensión de otras formaciones políticas".
Además, ha incidido en la importante función que cumplen Melilla y Ceuta como fronteras terrestres de Europa y España en África, una circunstancia que las convierte en "infraestructuras estratégicas".
En este punto ha considerado que es "el momento" de retomar los proyectos para que en esta legislatura las dos fronteras de ambas ciudades estén dotadas de obras, medios tecnológicos y humanos para garantizar el control de la inmigración y la seguridad.
Por su parte, el presidente de Melilla ha señalado que las dos ciudades autónomas suman 180.000 empadronados españoles en 30 kilómetros cuadrados y si a esta densidad de población se le suma la frontera, la escasez de recursos naturales y la presión migratoria "potente", la situación "siempre es delicada".
Imbroda ha llamado la atención sobre el problema de los menores extranjeros no acompañados, que en Melilla ascienden a 560, y ha demandado que se haga cumplir el acuerdo por el que Marruecos admite la repatriación de aquellos que han entrado irregularmente, ya que no se ha llevado a efecto.
Por otro lado, el delegado del Gobierno en Andalucía ha anunciado que los presidentes de Melilla y Ceuta serán galardonados en los Premios Plaza España que, con motivo del Día de la Constitución, se entregarán el próximo 5 de diciembre en Sevilla, y que ponen en valor la defensa de la libertad y el pluralismo.
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