El Club Melilla Baloncesto cayó en el pabellón Javier Imbroda Ortiz a manos de Delteco Gipuzkoa Basket por 63-68, en un duelo muy igualado y en el que la paciencia final del cuadro donostiarra fue clave. El mejor de los melillenses fue Amadou Sidibé, con 22 créditos de valoración.
Los azulinos comenzaban muy bien el partido. Asentados en defensa y con claridad en ataque. Los cuatros primeros puntos caían de parte del Decano (4-0). Pero los planes cambiaron rápidamente con la segunda falta de Agada a los dos minutos de encuentro. Tardaron en volver a entrar en el partido los de la ciudad autónoma que veían como los visitantes se colocaban a un punto (7-6) tras cuatro minutos del choque. Desde el exterior, el Melilla Baloncesto volvía a tomarse un respiro (12-6), pero inmediatamente llegaba un 0-10 de parcial que ponía a los donostiarras por delante al final del primer acto (16-20).
El segundo cuarto fue un constante tira y afloja entre melillenses y vascos. A cada intento de los de Alejandro Alcoba de recortar distancias en el marcador, Delteco Gipuzkoa Basket respondía para mantener siempre rentas que nunca superaban los diez puntos de diferencia. Con 32-37 se llegaba al descanso en el pabellón Javier Imbroda.
En la reanudación, Amadou Sidibé tiro del carro melillense. De la mano del norteamericano, con pasaporte costamarfileño, el Decano conseguía por fin dar caza a Delteco Gipuzkoa Basket y ponerse de nuevo por delante en el electrónico (51-50). Pero la alegría duraría poco, ya que los guipuzcoanos conseguían finalizar el tercer cuarto de nuevo por delante en el marcador (51-53).
El final del encuentro no fue acto para cardíacos. Con máxima igualdad se llegaba a los últimos segundos. Los melillenses perdían por tres puntos a falta de seis segundos para el final. Agada intento forzar la prórroga con un lanzamiento triple, pero el balón no entró y el cuadro vasco anotó a continuación para cerrar el partido y adjudicarse de esta manera la victoria por un resultado de 63-68.