El Ministerio de Sanidad ha abierto la posibilidad de que los recintos deportivos puedan recuperar el 100% del aforo, y hay comunidades, como Navarra, que ya planean para la semana que viene el final de las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus.
Sin embargo, el Gobierno local sigue apostando por la prudencia en Melilla. La ciudad sigue siendo la región de España con los peores datos epidemiológicos y el riesgo de contagio sigue siendo elevado, por lo que, de momento, se seguirán manteniendo las normas sanitarias en vigor. Capítulo aparte merece el desconociendo de parte de la población respecto a estas restricciones. Muchos no saben cuales son los límites de los aforos o los horarios de comercios y hostelería. Además, la norma de no portar la mascarilla en lugares abiertos se ha entendido parcialmente, pues muchos no respetan la distancia de seguridad cuando caminan por las calles de la ciudad. Sería interesante que las autoridades hiciesen una labor pedagógica al respecto y se informara con mayor asiduidad y claridad a la ciudadanía.
Respecto al mantenimiento de las normas sanitarias parece correcto que mientras la ciudad no abandone la situación de riesgo en la que se encuentra no se retiren. Habrá que ir viendo el comportamiento de la curva de contagios para saber cuando llega el momento de liberar a los melillenses de esta carga, pero de momento parece temprano.