Llenar las calles de música y alegría y conservar las canciones de la tuna. Con esos dos grandes objetivos por bandera, este viernes empieza el XXIII Certamen Internacional de Cuarentunas Ciudad de Melilla, que terminará mañana.
La cita contará con la participación de grupos procedentes de toda España y también de allende nuestras fronteras. De manera escalonada han llegado representantes de Medicina de Santiago de Compostela, de Aeronáutica de Santander, de Pamplona y de León, de Derecho de Valencia,de la Politécnica de Linares, de la Cuarentuna Universitaria de Barcelona, de Granada, de Córdoba y de Málaga. La agrupación de Melilla ejercerá como anfitriona en un evento en el que los acentos extranjeros los aportarán Holanda, México y Portugal.
En total, unas 250 personas, ya que “muchos de los asistentes vienen con sus parejas y llevan desde el miércoles conociendo la ciudad”, según el presidente de la Asociación de Antiguos Tunos del Campus Universitario de Melilla. Javier Alarcón, que es también el presidente de la asociación de comerciantes del centro, destaca la oportunidad que supone un evento así para la ciudad, pues la agenda de los asistentes es completa y variada.
Para la mañana de este viernes se ha organizado una visita al Tercio de la Legión; posteriormente, a las 13:30, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, encabezará un acto de bienvenida y recepción en el Palacio de la Asamblea.
En declaraciones a El Faro, Alarcón ha explicado que el grupo se va a repartir por diferentes locales del centro para dinamizar la ciudad: “Después, haremos tiempo hasta las 19:00, que empieza la ronda en la plaza de Menéndez Pelayo”.
Entonces, sonará la música, la alegría ‘tomará’ Melilla y “empezará el certamen en sí”. Organizado con el respaldo de la Consejería de Cultura y Festejos de la Ciudad, 30 personas han participado en su puesta en marcha. El día terminará con una cena en el Club Marítimo.
La jornada del sábado será intensa y empezará con visitas guiadas a Melilla la Vieja y para conocer la cara más modernista de la ciudad.
Tras una comida en el Casino Militar, llegará lo que Javier Alarcón define como “lo más importante”, esto es, la actuación en el Teatro Kursaal-Fernando Arrabal a las 18:00. “Ocho agrupaciones van a actuar durante unos 20 minutos. El público valorará, pero, aunque todos intentaremos hacerlo lo mejor posible, no será una competición”, añade Alarcón, que señala que “la última actuación será la de Melilla en su papel de anfitriona”.
La entrada es gratuita. Pero, además de para pasar una tarde musical, la cita en el Kursaal también tiene un cariz solidario: la asociación Autismo Melilla va a instalar un stand para recoger donativos.
El sábado, después de una tarde que promete ser emocionante, las cuarentunas celebrarán una cena de hermandad en el hotel Melilla Puerto.
Su carácter multicultural, su espíritu de convivencia, su riqueza modernista y con una Historia de España vinculada al siglo XX son, según el presidente de la Asociación de Antiguos Tunos del Campus Universitario de Melilla, las bazas que le valieron a la ciudad ser la elegida, el año pasado en Oviedo, para acoger en este 2019, el XXIII Certamen Internacional de Cuarentunas Ciudad de Melilla.
Un evento “importante para que la ciudad se llene de música y alegría” y cuya “finalidad es conservar las canciones de la tuna”.
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