Siham lleva meses en las calles de Melilla en contacto con menores y mayores extranjeros sin un hogar fijo y tiene claro que la solución a esta situación pasa por las administraciones públicas. Es educadora de calle, y junto a Musa, Karim y más compañeros, buscan a menores extranjeros no acompañados (mena) para que ingresen en los centros de acogida si no lo están aún.
En las calles de Melilla hay entre 40 o 50 menores extranjeros, unos 80 extutelados y además, una bolsa considerable de jóvenes que no han pasado por las instituciones de la ciudad, según explicó a El Faro el viceconsejero del Menor. Quiso resaltar que desde su área se le quiso dar un vuelco al programa de educadores de calle para que se diese un trato integral a los mena en calle, haciendo tareas más allá de las asistenciales, como acompañarles y asesorarles en el tema documental, animarles a volver a los centros de acogida o cualquier otro asunto que surja, por eso quiso felicitar a los trabajadores y trabajadoras del programa.
Musa señaló que es una ardua tarea tratar con esta realidad. “Nos dedicamos en cuerpo y alma”, aseguró, sensibilizando también sobre la situación. Karim expuso que llevan un registro de quienes se van encontrando. Esto permite tener una idea aproximada de la situación y no exacta, pero lo que sí tienen que han comprobado son las dificultades administrativas a las que se enfrentan numerosos menores es que si no salen del centro de acogida con el empadronamiento y solo con una resolución, no podrán desarrollar una ciudadanía plena.
Es el caso de Ali, un joven que recientemente cumplió los 18 años. Salió del centro de menores con una resolución y unos pocos documentos más, como una cédula que caduca al poco tiempo. Cuando fue a empadronarse, le piden dinero y un contrato de alquiler y para poder alquilar, necesita un contrato de trabajo y para ello, necesita su documentación en regla. Esta es la situación en la que se encuentran decenas de menores extranjeros que han pasado por la tutela de la CAM.
Ali expone que su estancia en Melilla ha sido dura. Al menos, por ahora, está acogido por una familia, aunque esta no deja de ser una solución temporal. Señala que para saber cómo está la situación, basta con mirar.
Musa cree que en la zona del barrio puede haber unos 10 jóvenes inmigrantes en Ramadán. “La vida de estos chicos en la calle es dura” y no cree que sea cuestión de que ellos quieran estar así, como aseguran algunas voces. Explicó que se ven abocados a la mendicidad, como pedir en la puerta de los supermercados o por la calle, a lavar coches o a ayudar a las personas que vienen de hacer la compra con las bolsas
Dada la situación, Siham contó que muchos se ven frustrados porque es como dar vueltas en la misma rotonda continuamente sin llegar a un destino. Y es por ello que son las administraciones públicas las que tienen la solución, pues asegura que conocen la situación.
215
La Viceconsejería del Menor ha informado a El Faro que de aquí a diciembre de este año 215 menores tutelados por la Ciudad Autónoma cumplirán 18 años: en mayo 43, junio 24, julio 35, agosto 34, septiembre 23, octubre 24, noviembre 19 y en diciembre 9 del centro de La Purísima. En el centro asistencial solo serán cuatro en total. En total, la Ciudad tutela a 346 menores en el centro de la Purísima, en el Centro Asistencial a 118 distribuidos en tres pabellones: en el de las niñas 46, en el de los niños 62 y en la casa cuna 10. En la Divina Infantita hay 31 niñas y en el centro de menores infractores 41, de las que 7 son niñas.