La cuenta de Twitter de L’Oriental Marocain, vinculada al Gobierno de la Región de Oujda, anunció ayer que Madrid y Rabat habrían iniciado conversaciones para preparar la Operación Paso del Estrecho del próximo verano 2021.
Según recoge esta fuente, las autoridades de ambos países coinciden en señalar que la situación epidemiológica ha mejorado mucho en comparación con el verano de 2020, cuando se suspendió la OPE.
Esto dicho así, en el momento en que toda España se prepara para una cuarta ola de la pandemia del coronavirus y la vacunación se ha ralentizado con la paralización de las dosis de AstraZeneca, parece, como mínimo precipitado y triunfalista.
Pero ya sabemos que una cosa es la realidad y otra muy distinta la percepción que tienen de ella los políticos. No es lo que pasa, sino lo que ellos creen que pasa.
Conclusiones: Marruecos avanza que previsiblemente habrá caravanas de migrantes procedentes de toda Europa, de vuelta a los pueblos y ciudades de su país, a través de las carreteras y los puertos españoles.
La pregunta del millón es si este anuncio implicaría la apertura de la frontera de Melilla. Nos queda la duda razonable sobre si la Operación Paso del Estrecho volverá a ser lo que era antes de la Covid 19 o si en esta futura etapa de nueva normalidad las caravanas evitarán nuestra ciudad, rompiendo con una tradición histórica.
En principio, tenemos motivos para pensar que habrá conexiones directas entre Beni Enzar y Almería o entre Motril y Beni Enzar. A esto hay que sumar la subida de los precios del barco desde la península a Melilla. Por tanto, en un contexto de crisis económica como el actual, muchos sacrificarán la comodidad y mirarán por sus bolsillos. No quiero ser ave de mal agüero, pero me da que si finalmente hay OPE nos tocará ver los toros de la barrera.
Y esta conjetura me lleva a pensar en los vecinos de Melilla, que llevaban años quejándose, con toda razón, de todos los inconvenientes de la OPE: claxon, atascos y congestión del tráfico en las principales arterias de la ciudad; despliegue policial y sanitario... Querían y pedían un alivio para esos inconvenientes y el remedio ha sido peor que la enfermedad. Como dice el refrán: cuidado con lo que pides.
El año pasado no tuvimos esas colas de coches en Melilla, pero perdimos también todos los ingresos en concepto de tasas por el atraque de los barcos en nuestro puerto. Además, apuesto a que los comerciantes de las gasolineras echaron de menos la OPE que, como todo, tiene su lado bueno y su lado malo. Sin embargo, en los tiempos que corren, de crisis económica severa, lo malo ya no parece lo peor.
La filtración de un supuesto acercamiento entre España y Marruecos para preparar la OPE, anunciado desde el país vecino, nos lleva a pensar que cuando el río suena, piedras trae. Aunque eso no es una certeza absoluta.
Durante meses hemos escuchado que la frontera iba a abrir en octubre de 2020, luego dijeron que en febrero de 2021 y al final, ya ni hablamos de una fecha concreta. Por increíble que parezca, nos hemos acostumbrado a vivir de espaldas a nuestro vecino.
Aunque la vacunación va bien en Melilla no hay nada que nos haga pensar que en junio-julio-agosto y septiembre estaremos mejor (de salud) que en estos momentos (somos líderes en incidencia de la enfermedad) como para darnos el lujo de abrir las puertas de la ciudad de par en par y dejar que entren viajeros marroquíes procedentes de todos los rincones de Europa.
¿Qué se deja la OPE en España? Pues salvo algún bocadillo en algún restaurante de carretera, el grueso del dinero se queda en los puertos y gasolineras andaluzas y de Melilla y Ceuta. Creo y defiendo que si Marruecos refuerza su transporte marítimo de manera que los viajeros elijen el enlace directo en lugar del trayecto por nuestra ciudad, no veo qué gana nuestro país desplegando operativos de Protección Civil, de Policía Nacional y Guardia Civil, de Cruz Roja… si al final son ellos los que disfrutan el banquete y nosotros los que pagamos la cuenta.
Después del agravio del primer ministro marroquí diciendo que Melilla y Ceuta son tan marroquíes como el Sáhara, qué menos que nuestro Gobierno barra para casa y condicione la OPE a que ésta pase por las dos ciudades autónomas. No por cuestiones chovinistas sino porque ambas lo necesitan como el comer.
No podemos resolver de tú a tú nuestro conflicto con Marruecos. Esa responsabilidad es del Estado, que se supone que nos representa. Sólo nos queda exigir que reclamen por nosotros desde Madrid. Pero eso, evidentemente no ocurrirá si desde la Delegación del Gobierno de nuestra ciudad no les ponen sobre aviso. Y eso es algo que yo dudo. A veces parece que hay más vida en Marte que dentro de la Delegación.
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