El portavoz en el Senado del PP, Javier Maroto, afirma que se lleva una impresión mucho mejor de Melilla de la que tenía gracias a las explicaciones y comentarios de sus compañeros de partido. “Ellos me hablaron muy bien de la ciudad y se quedaron cortos”.
–Son muchos los empresarios que hablan ya de crisis económica en la ciudad. ¿Cree que es así?
–Desgraciadamente conocemos de primera mano lo que significa una crisis económica porque la última la hemos vivido en Melilla y en el resto de España de forma muy reciente. Y sabemos la diferencia que hay cuando la crisis la gestiona el PSOE o lo hace el PP. Para las empresas o autónomos, y para todo el país, para el PSOE la crisis en primer lugar se niega y luego se agrava. En cambio, con el PP y el esfuerzo de todos los españoles la crisis se resuelve antes y se evitan medidas drásticas, como fue el recorte de un 30% de las pensiones que llegó a haber en algunos países y que en España no sufrimos. Ésa es la diferencia. También los agentes económicos han dicho que tendremos una nueva crisis económica en España y, por ello, pido a los melillenses a que ayuden al resto del país y a ellos mismos a que ésta no la gestione Pedro Sánchez porque sería un suicidio colectivo para todos nosotros.
–¿Qué puede aportar el PP para revertir esta situación?
–Las medidas del PP en materia económica son conocidas. Cuando hemos gobernado, con más aciertos que errores y, por lo tanto, dando frutos, hemos tenido más empleo, más crecimiento económico y más protección para los servicios públicos. Ésas son recetas que hasta la izquierda ha reconocido. Para nosotros lo económico es muy importante. Porque no hay política social si no hay una buena política económica. No hay política social si dejas el país quebrado como hace el PSOE.
–La aduana comercial con Beni Enzar se cerró hace un año de forma unilateral por Marruecos. ¿Qué pueden hacer para reabrir esta puerta?
–Nuestro compromisos y el del presidente del PP nacional, Pablo Casado, es impulsar la reapertura de la aduana porque es fundamental para el conjunto de Melilla y de España. Es un compromiso que hemos adoptado escuchando al PP de Melilla, que es el que conoce mejor que nadie la realidad de esta ciudad autónoma.
–El PSOE ha anunciado que ya está la frontera inteligente en marcha. ¿Cuáles creen que van a ser sus resultados?
–La frontera inteligente para permitir la detección de personas por sus rasgos físicos o por el contacto de la huella digital es una alternativa entre otras muchas que existen. Pero hay que escuchar la opinión de la Policía Nacional y de la Guardia Civil antes de implementarla. Pero, sobre todo, lo que es inteligente en todas las fronteras en no seguir teniendo un Gobierno del PSOE. Hemos conocido su filosofía de papeles para todos y de la falta de control de las aduanas y de la fronteras. Asimismo, ha tenido una falta de respeto ante la Policía Nacional y la Guardia Civil en la defensa de su actividad profesional. Lo inteligente para mejorar las fronteras es evitar que siga Sánchez. Una política rigurosa en materia de frontera y de inmigración viene solo de la mano del PP.
–¿Qué opinión le merece la política migratoria de este último año?
–Creo que la política migratoria que da bandazos, que lo mismo te dicen que van a quitar las concertinas que van a tener mano dura, que lo mismo que te dicen que abren los puertos al Open Arms y lo contrario, solo generan incertidumbre y efecto llamada. Al final el que paga el pato es siempre el que está más cerca de la frontera y es el que sufre las consecuencias. El PSOE es enemigo de Melilla porque es enemigo de una política eficaz en materia de frontera aduanera y en materia de inmigración. Y eso lo tienen que saber los melillenses.
A los ciudadanos les quiero pedir una reflexión. En estas elecciones, no es como en otras ocasiones, en las que el PP obtiene el diputado de forma segura. Hay otros partidos en el centro-derecha que se presentan. Si dividimos el voto de centro-derecha no sólo se queda Pedro Sánchez en La Moncloa, sino que la voz de Melilla sería Mustafa Aberchán, porque es el que puede sacar el escaño. Estoy convencido de que la mayoría de los votantes de Ciudadanos y de Vox compartirá conmigo en que prefiere un representante del PP en el Congreso antes que Aberchán. Por eso debemos saber en Melilla que, si dividimos el voto, primero sale Aberchán y después se queda Sánchez. Melilla no se merece sufrir dos castigos seguidos tan gordos.
–¿Qué le parece que partidos tan localistas se presenten al Congreso para defender lo que ellos dicen que es la voz de Melilla, como es el caso de CpM?
–Tratar de defender España con una voz que solamente atiende a unos intereses personales, como es el caso de Aberchán, no es ni siquiera defender Melilla. Es todo lo contrario. Es defender los intereses de esa persona. Creo que la mayoría de los melillenses no quieren que su voz sea Aberchán y, sin embargo, teniendo esto claro, si dividimos el voto entre Cs y Vox disminuyen las posibilidades de que el PP pueda obtener el escaño. En otras regiones de España, donde hay más de un diputado, podemos tener otro debate, pero en Melilla solo se elige a una persona: o sale el PP o sale Aberchán. Que los melillenses elijan sabiendo que si dividen el voto ni Cs ni Vox pueden obtener el escaño y, en cambio, sí que pueden facilitar con la división del voto que haya una voz como Aberchán en Madrid. Y lo que es peor, un diputado menos en el PP, que es el partido que puede dar la suma para que el cambio se produzca en España.
–Retomando el tema migratorio, ni las concertinas ni el mar están impidiendo que los migrantes intenten llegar a Melilla y las Islas Chafarinas se están usando para hacer llegar pateras en estos meses.
–Hay que reforzar por todos los medios y no sólo la frontera física por tierra, sino las vías que hay para acceder a través del mar con toda la intensidad y la contundencia antes que tener que lamentar algo. El PSOE seguramente no se habrá hecho esta pregunta, pero el PP de Melilla nos ha trasladado la dificultad que existe y hay que prevenir antes que lamentar. Por lo tanto, es otra razón más para pedir la confianza de los votantes en el PP. Un partido que en esta tierra, en Melilla, conoce el problema de primera mano, a pie de frontera, y escuchando a los agentes que viven y conocen esta situación. Y esa voz tiene que llegar a Madrid para que el Gobierno de España la tenga muy presente en su política aduanera, migratoria y fronteriza.
–¿Le parece adecuado que se construya un muro de hormigón como propone Vox?
–Yo creo que Vox dice eso del muro de hormigón para intentar llevarse algún voto cuando la gente vota desde un lado más emocional. Pero les diría con todo el respeto a la candidatura de Vox que ya nos han trasladado ellos mismos que saben que no van a ganar las elecciones en Melilla y que, por lo tanto, saben que no va a haber un diputado por Vox en Melilla. Sin embargo, saben también que si se restan los votos al PP, el que se frota las manos en Melilla es Aberchán y creo que no tienen nada más claro los afiliados de Vox que es que no quieren al cepemista como su diputado. Les pedimos con humildad desde el PP para que aunemos el esfuerzo para que el único diputado que puede tener Melilla sea del PP y no Aberchán.
–CpM asegura que la voz de Melilla no se escucha en Madrid. ¿Es cierto?
–La voz de Melilla no es la voz de Aberchán, sino que el tiene la suya propia y es la voz de sus propios intereses que en muy poco representan a una mayoría social, que en cambio, está más en defender valores como por los que lucha el PP. Mi formación defiende a todos sin importar su credo o color de piel. El PP defiende la idiosincrasia de Melilla y esa voz la tiene nuestros candidatos al Congreso y al Senado. Votar a Cs o Vox en Melilla es, desgraciadamente, hacerle el caldo gordo a Aberchán. ¡Qué más querría él que los votantes de centro y derecha de Melilla nos dividiésemos para, a río revuelto, saliese ganando en estas elecciones.
–¿Cómo ve la problemática de que haya 1.000 menores extranjeros no acompañados?
–Que en una ciudad como Melilla tenga más de 1.000 menas es del todo insostenible por el esfuerzo económico que supone y por las repercusiones sociales que implica. La solidaridad no tiene nombres y apellidos ni entiende de derechas e izquierdas. La solidaridad es un prioridad de cualquier sociedad democrática. Pero necesitamos también notarnos de herramientas y medidas o de normativas que garanticen que los recursos se inviertan en lo que se debe. Las posiciones irresponsables de otros gobiernos, incluido el de España, permitiendo desterminadas conductas sin poner control no se sigan produciendo. Hay que tomar cartas en el asunto en Melilla y en el resto de España con menores. Solidaridad sí evitando abusos.
–¿Y esa solidaridad vendría de otras autonomías también?
–El asunto de los menas no es solo de Melilla, sino de toda España y hay que abordarse desde una política nacional. Por eso necesitamos que la voz de Melilla la tenga un partido nacional que afronte esta situación difícil desde un ámbito nacional con un discurso que se pueda entender igual en Galicia, País Vasco, Cataluña o las Islas Canarias.