El vicepresidente considera que el caso es “nocivo para la democracia” y lamenta la imagen que está dando Melilla tras la imputación de un notario y la esposa de Aberchán. “No nos agrada nada lo que está ocurriendo en Melilla”. Con estas palabras opinó el vicepresidente de la Ciudad Autónoma, Miguel Marín, sobre las últimas novedades en el caso del voto por correo, en el que han sido recientemente imputados un notario y la esposa del líder de Coalición por Melilla (CpM), Mustafa Aberchán, por presuntos delitos de prevaricación y falsedad.
En número dos del Gobierno local consideró que las últimas noticias sobre el caso no hacen ningún bien a la imagen de Melilla. “Es muy nocivo para la democracia, lo que ha ocurrido daña gravemente la opinión que se tiene de la ciudad autónoma fuera de sus fronteras”, aseveró.
Sus manifestaciones son muy similares a las que realizó el pasado martes, cuando fueron imputados en un nuevo auto judicial dos ex delegados del Gobierno, José Fernández Chacón y Gregorio Escobar, actual líder del Partido Socialista (PSOE) a nivel local; el ex director del Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE), Joaquín Arana, y la ex directora de la Unidad de Programas y Desarrollo (UPD), Ana Mansilla, por presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias, malversación de caudales públicos y fraude.
En lo que se refiere a los últimos dos acusados, que fueron imputados el miércoles en una pieza separada del nuevo auto judicial, el vicepresidente autonómico reiteró su opinión de que lo que ocurrió en las elecciones generales del 2008 “nunca debería haber sucedido”, al tiempo que mostró su confianza de que no vuelva a repetirse en el futuro.
Asimismo, destacó que desde el Ejecutivo melillense mantienen la idea de que hay que respetar el curso y las decisiones que está tomando la Justicia sobre el caso del voto por correo para que finalmente pueda aclararse qué ocurrió exactamente durante los comicios generales del año 2008.
Hay que recordar, con respecto a los dos últimos imputados, que el juez considera que existieron irregularidades por parte del notario acusado en la formalización de poderes para emitir el voto por correo de personas que se encontraban impedidas y que, por tanto, no se podían presentar en la sede de Correos.
En lo que se refiere al papel de la esposa de Aberchán en la trama, el auto señala que firmó cuarenta y dos de esos certificados médicos, según un informe de la Guardia Civil.
Planteamientos firmes
Así pues, el Ejecutivo de la Ciudad Autónoma continúa firme en sus planteamientos, pues las manifestaciones que realizó ayer Marín fueron prácticamente idénticas a las que hizo el martes, cuando imputaron a Chacón y Escobar.
Para el vicepresidente, lo principal es que la Justicia siga su curso para aclarar lo que ocurrió exactamente durante las elecciones generales del 2008. No obstante, no pudo sino lamentar la imagen que está ofreciendo Melilla al resto del territorio nacional con este caso.