Categorías: Política

Marín: “Marruecos prohíbe y permite la inmigración cuando quiere”

El presidente accidental cree que el Gobierno central debe “exigir” al país vecino que “cumpla con sus obligaciones de acuerdo con la política de buena vecindad”.

El presidente accidental del Gobierno de Melilla, Miguel Marín, se mostró convencido ayer de que la ciudad dejará de sufrir la presión migratoria de este verano “cuando Marruecos quiera”, ya que “la experiencia a lo largo de estos años” demuestra que el país vecino “prohíbe y permite cuando quiere esa inmigración”.
A preguntas de los periodistas, el vicepresidente primero de la Ciudad Autónoma de Melilla opinó que el Gobierno de España debe “exigir” a Marruecos que “cumpla con sus obligaciones de acuerdo a la política de buena vecindad” y no permita que la inmigración ilegal entre a ambos países. Y es que en el último mes ha sido prácticamente a diario la llegada de imigrantes por vía marítima procedentes del país vecino.
En este sentido, el portavoz del Ejecutivo local, Daniel Conesa, ya manifestó hace unos días la preocupación de la Ciudad por la continua llegada de pateras a la ciudad que estaba saturando las instalaciones del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) y que de no ponerse remedio, en colaboración con las autoridades marroquíes, podría causar “un problema social” en la ciudad.
De hecho, hace una semana los responsables de la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía viajaron a Rabat para reunirse con el Ejecutivo marroquí para tratar el problema de la inmigración ilegal.

Reunión de cortesía con Claret

Precisamente la inmigración será uno de los asuntos que abordará personalmente el próximo miércoles en el encuentro que mantendrá con el delegado del Gobierno, Antonio María Claret, que visitará a Marín en su condición de presidente accidental con motivo de la llegada a Melilla del director general de Tráfico, Pere Navarro.
Durante esta visita institucional, además de interesarse por la “situación real de la inmigración que está llegando a Melilla”, Marín también preguntará al delegado del Gobierno por las largas colas de vehículos que se han producido desde la semana pasada en la frontera de la ciudad autónoma para pasar a Marruecos.
Marín recordó que la circulación fronteriza es una competencia estatal en la que la Ciudad Autónoma “siempre va a apoyar” en lo que se le requiera “aunque no tenga competencias para ello”.
“Ese esfuerzo nunca va a decaer”, insistió Marín, que confió en que las grandes retenciones que se han registrado en la frontera “se resuelvan lo antes posible” porque los melillenses son los que “realmente padecen los efectos de esa paralización”.

“El PP dará un impulso a Melilla tras el 20–N”

El vicepresidente primero del Ejecutivo melillense, Miguel Marín, aseguró ayer que el adelanto de las elecciones generales al 20 de noviembre le ha llenado de ilusión porque “entrará un nuevo Gobierno presidido por Mariano Rajoy que dará a Melilla un nuevo impulso”.
A preguntas de los periodistas, el vicepresidente recordó que Rajoy tiene firmado un “compromiso” con la Ciudad Autónoma por el cual llevaría a cabo una serie de actuaciones reivindicadas en los últimos años por el Ejecutivo melillense si llega a ser elegido presidente del Gobierno.
Marín enumeró entre los proyectos reclamados por la Ciudad Autónoma la ampliación del Puerto, un proyecto “importantísimo” para Melilla porque supondría la creación de muchos puestos de trabajo y le permitiría tener una nueva actividad empresarial en torno al tráfico de contenedores.
El presidente accidental de la Ciudad Autónoma lamentó que este proyecto se encuentra “paralizado” por el Gobierno socialista, al que ha acusado de “entretener” las reivindicaciones realizadas desde Melilla mediante retrasos y promesas que finalmente no se han llegado a cumplir.
Como ejemplo, citó la petición del Ejecutivo melillense para aumentar la bonificación a las cuotas de la Seguridad Social al 50 % y la ampliación a más sectores, que fue planteada por primera vez “hace muchos años” y sobre la que el Gobierno central ha ido “retrasando año tras año, intentando disimular y prometiendo que lo iba a llevar a cabo”.
También ha lamentado que se ha dado esta situación en casos como la petición para incrementar al 75 % las deducciones del IRPF y el Impuesto de Sociedades, la construcción de viviendas sociales o el abaratamiento del transporte aéreo para equiparar a los melillenses con el resto de españoles a la hora de desplazarse por el territorio nacional.

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