Categorías: Sociedad

Maltratadas y madres solteras que están en paro son las mujeres que más ayudas piden

La Viceconsejería de la Mujer les ofrece orientación, formación y apoyo psicológico para evitar la exclusión.

 

Víctimas de violencia de género, madres solteras o mujeres separadas, en la mayoría de los casos desempleadas, son el perfil de persona que acude a la Viceconsejería de la Mujer a pedir apoyo. La responsable del área, Fadela Mohatar, explicó ayer en declaraciones a El Faro, que el número de solicitantes de ayuda se ha incrementado de forma importante en los últimos años, debido a la crisis económica. Asimismo, afirmó que, tal y como se reflejará en el documental que está preparando la Red Española para la Lucha contra la Exclusión Social (EAPN) la baja cualificiación de muchas de estas melillenses dificulta en muchas ocasiones su acceso al mercado laboral y a otros servicios.
Mohatar apuntó que el trabajo que se realiza desde su Viceconsejería va dirigido a ofrecerles a estas mujeres apoyo psicológico, orientación laboral y asesoría jurídica. No obstante, indicó que en los últimos años se han convertido en una extensión de la Consejería de Bienestar Social, porque aunque en algunas ocasiones las solicitudes que les hacen estas melillenses no son estrictamente de su competencia, intentan ayudarlas en la medida de lo posible. De hecho, la viceconsejera indicó que para intentar que las mujeres que no saben leer ni escribir se queden sin algunos servicios, desde su área intentan facilitarles al máximo las gestiones, ayudándolas a cumplimentar documentos o aconsejándoles sobre cómo pueden solucionar algunos de los problemas que tienen.
La viceconsejera indicó, además, que la crisis ha provocado que muchas mujeres regresen a Melilla desde la península después de haber perdido su empleo, lo que ha provocado que las peticiones de ayuda se haya incrementado aún más en este tiempo.
Mohatar explicó que para paliar la falta de cualificación profesional tanto desde la Viceconsejería como a través de otras entidades  como Promesa o el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) se ofrecen cursos de formación a las mujeres para que tengan más opciones de incorporarse al mercado laboral. Asimismo, la viceconsejera apuntó que cooperan con ONG de la ciudad  ofreciendo atención a estas mujeres en los propios barrios, con planes de atención en asociaciones de vecinos.
Además, desde la Viceconsejería, gracias a los planes de empleo que se van impulsando como medidas de choque, aportan información sobre mujeres en situación de especial vulnerabilidad, en concreto víctimas de violencia de género sin recursos. Con esta medida no sólo consiguen procurarles un sustento con estos contratos, sino que también se propicia la autonomía de la mujer para evitar que vuelva a caer en la relación violenta como único modo de mantener a su familia.

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