La esperanza de vida al nacer en Melilla y Ceuta es de 80,7 años, la más baja de España. Según datos publicados por el Ministerio de Sanidad, lo melillenses viven 2,6 años menos que la media del país y la distancia es de 4,4 años respecto a los madrileños, que tienen una esperanza de vida de 85,1 años. Además, las mujeres viven más. En el caso de las ciudades autónomas la diferencia entre sexos es de 5 años. A pesar de que el dato en nuestra ciudad es aceptable, si lo comparamos con los de otros países, nos encontramos alejados del resto de regiones de nuestro país. Las razones para esto son variadas, desde los hábitos de vida menos saludables que en otros lugares de la geografía española, a factores ambientales o a disponer una sanidad que necesita ponerse al nivel de medios que el resto del país. Lo que si es cierto, es que este dato es otro más que nos sitúa a la cola respecto a la inmensa mayoría de regiones de España. Tenemos malos datos en educación, en empleo y la criminalidad ha aumentado en los últimos tiempos. Una radiografía nada amable con la gestión de nuestros políticos, que no han encontrado soluciones para que Melilla avance y deje de estar entre los últimos en casi todas las estadísticas.