El colectivo suma hoy su sexto día de protesta frente a la Delegación del Gobierno para ser enviados a la península.
Lejos de cansarse, los treinta inmigrantes congoleños que el pasado lunes iniciaron una sentada frente a la Delegación del Gobierno a modo de protesta por su situación, continúan poniendo en práctica más iniciativas para llamar la atención de la sociedad melillense.
Según comunicó ayer a El Faro el portavoz del grupo, han comenzado una campaña de recogida de firmas entre los ciudadanos para recabar su apoyo. Cuando consigan un número de rubricas considerable, las presentarán en Delegación.
No obstante, el grupo no se pone ninguna cifra límite a la hora de recabar firmas. Su intención es atraer la atención de la sociedad sobre su problema. Por el momento, su resultado es más bien discreto, pues ayer por la tarde habían conseguido unas cincuenta firmas, aproximadamente.
El apoyo que piden es para que se agilice su traslado a la península, pues algunos llevan residiendo en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de la ciudad casi tres años.
El hastío que sienten al llevar tanto tiempo en Melilla sin poder salir se acrecienta al ver como otros inmigrantes que llevan menos tiempo que ellos han marchado ya a la península.
Además, la situación que atraviesa su país de origen, la República Democrática del Congo, les hace sentir “una gran presión y tristeza”, según trasmitieron en una carta a la Delegación del Gobierno, donde señalaban que no saben en qué estado se encuentran sus familiares y amigos, ya que muchas zonas del país están incomunicadas a causa de la agitación social y política. Ellos mismo califican lo que ocurre de “guerra civil”.
Los inmigrantes sumaron en la jornada de ayer su quinto día de protesta. La única novedad reseñable en la zona donde han decidido realizar la sentada, el tramo de acera existente entre la Delegación del Gobierno y la Plaza de España, es que cada vez portan más carteles donde explican su situación.
Asimismo, cada vez son más los que deciden pasar la noche en la zona de protesta, ya que al comienzo sólo lo hacían diez personas aproximadamente. En los últimos días, este número se ha ido incrementado pese a que el tiempo por la noche no les ha hecho fácil su sueño a la intemperie.
Hoy comienzan su sexto día de protesta con la intención de no abandonar la zona hasta que se atiendan sus demandas.
La Delegación del Gobierno sigue firme en su postura.
La Delegación del Gobierno de Melilla no ha variado su postura desde el primer día de protesta. El Gabinete de Prensa señaló ayer a El Faro que su planteamiento sigue siendo el mismo, y que los congoleños deberán atenerse a lo establecido en la Ley de Extranjería y a los plazos que ésta marque para que se solucione su problema.
Asimismo, se mostraron comprensivos con la situación que vive este colectivo, al que una vez más pidieron paciencia.
La dificultad para trasladar a estos inmigrantes a la península estiba en que los contactos con la embajada de su país son casi inexistentes a causa de la inestabilidad política que afecta a la República Democrática.
Pese a todo, los inmigrantes congoleños siguen frente a la Delegación del Gobierno con el ánimo de que se les lleve a la península en el menor tiempo posible. El pasado miércoles explicaron al delegado, Abdelmalilk El Barkani, su situación en un escrito.