“Antes de la finalización de los cursos, casi todos los alumnos se encuentran trabajando en un establecimiento de la ciudad”, comenta el coordinador del centro, Esteban Barajas.
“Se han confirmado las expectativas de los dos cursos de larga duración que se han impartido durante este año en las instalaciones de la Escuela de Hostelería de la ciudad”, comentó el coordinador de este centro formativo, gestionado por la ‘Fundación Hispano-Árabe de la Dieta Mediterránea’ con sede en Benahavís (Málaga), Esteban Barajas Martínez, a ‘El Faro’.
La mejora, tal y como dijo el coordinador del centro formativo, se puede ver desde la entrega de las solicitudes para formar parte del grupo-clase de cada una de las ediciones, ya que a tenor de lo afirmado por Barajas, “cada año hay más solicitudes entre las que nos encontramos con personas con mucha cualificación que desean cursar la formación en la especialidad en hostelería”.
Este hecho implica que exista un procedimiento selectivo más depurado, mejorando bastante el ambiente dentro de las aulas, entre los alumnos y de éstos con los profesores.
Uno de los objetivos primordiales de este centro formativo es la inserción laboral de una gran parte de los melillenses que visitan las instalaciones de la Escuela de Hostelería, “meta que logramos casi al 100 por 100 antes de finalizar el curso, ya que los alumnos se encuentran familiarizados de alguna forma con el mercado laboral”.
De esta manera, algunos de ellos se encuentran trabajando a jornada completa, otros a media jornada y los demás están “echando extras” en los restaurantes y establecimientos hoteleros de la ciudad.
La inserción laboral, como comentó Barajas, es el resultado de una labor muy intensiva en cuanto a la docencia se refiere, ya que una de las iniciativas que más beneficios ha reportado para los estudiantes de los dos cursos de la Escuela de Hostelería, tanto para los de Cocina como para los de Jefe de Rango, fue el hecho de “abrir al público el restaurante del centro, lo que les facilitó la práctica real con los clientes que se encontrarán más tarde en muchos de los establecimientos y hoteles de Melilla”.
En cuanto al balance de la labor desempeñada por los docentes de este centro formativo, el coordinador de la Escuela de Hostelería de la ciudad, afirmó que “este año volveremos a contar con la misma plantilla, teniendo en cuenta que en el transcurso del ejercicio del año pasado se incorporó el profesor de Sala, José Luis Roldán, que continuará este año”.
Así, Barajas se mostró muy satisfecho con los profesionales de la docencia que actualmente son los encargados de la impartición de los conocimientos necesarios para que los estudiantes se conviertan en unos excelentes profesionales, ya sea de Sala, ya sea de Cocina.
Formación complementaria
En alusión a los seminarios que en el transcurso del año académico reciben los estudiantes de la escuela, Barajas matizó que “la implantación de nuevos seminarios, distintos a los de las ediciones pasadas, ha sido un acierto, teniendo en cuenta la aceptación que ha tenido entre los alumnos y las destrezas que han sido incentivadas con esta formación”.
Uno de los ejemplos de esta formación complementaria ha sido el seminario de corte de jamón y de fruta y verdura que los alumnos han “disfrutado mucho”, sobre todo después de ver el resultado obtenido de la talla de frutas y verduras como decoración del plato que se sirve al comensal.
El coordinador de la Escuela finalizó diciendo que los interesados en inscribirse formalmente en uno de los cursos de la presente edición, se podrán dirigir a Proyecto Melilla, S.A. (Promesa) o solicitar directamente la instancia y obtener información acerca de los requisitos necesarios para cursar esta formación en la Escuela de Hostelería ubicada en la Plaza de los Aljibes de Melilla la Vieja.