La escudería JBT Clásicos Rácing de Melilla se presentaba en la octava edición del Rally Baja Lorca, que se disputó el pasado fin de semana en tierras murcianas, con serias opciones de luchar por el subcampeonato de España de la mano de la pareja Burillo/Casado, pero una avería de motor en el primer tramo de la competición, y el hecho de no llevar asistencia técnica debido al bajo presupuesto, les obligó a abandonar la competición y con ello a perder casi todas las opciones de conseguir el subcampeonato de España de Rallyes en su categoría regular.
Lo peor es que sus rivales también tuvieron problemas mecánicos en el primer tramo de la carrera, pero pudieron solventarlos para salir el segundo día y conseguir unos valiosos puntos que alejan a los melillenses del campeonato a falta de solo una prueba para la finalización del Campeonato de España.
Por su parte, la pareja López/Fuentes finalizó en un digno cuarto puesto, con un primer tramo excelente, pero con el segundo, muy duro y con muchas nubes de polvo, desastroso, aunque estuvo luchando por el pódium hasta el último momento.
La carrera en sí fue muy dura, la más rápida del campeonato, solo había tramos lentos en los inicios y cuando se tenían que cruzar poblaciones, pero en general fue una competición que puso a prueba la mecánica y en la que vencieron los que mejor presupuesto tenían.
Los coches ya venían muy tocados de la dureza del Rally de Cuenca, disputado a finales del mes pasado, y no ha dado tiempo material para poner a punto los vehículos debido al bajo presupuesto con el que cuenta la escudería.
La escudería melillense ya ha confirmado la participación en la próxima cita, que será el Rally Baja Trans Andalusía, y que se disputará los próximos 27 y 28 de noviembre en Sevilla, y será la última prueba puntuable para el Campeonato de España de Rallyes TT, mientras que la de la pareja Burillo/Casado queda en el aire porque deben valorar los daños del vehículo y ver si les da tiempo a repararlo antes de la prueba.