Lluvia de goles en un encuentro muy intenso

El CF Rusadir consiguió una trabajada victoria ante un rival que jugó durante buena parte del partido en inferioridad numérica.

El equipo que dirige Karim y Ahmed tuvo que emplearse a fondo para doblegar a un equipo que nunca le perdió la cara a un partido en el que mereció mejor suerte. El tramo inicial del partido no tuvo un dominador claro, pero fue el equipo local el que fue creciendo con el paso de los minutos. Fueron los visitantes los primeros en inquietar la portería contraria por mediación del delantero centro Dani, pero el disparo cruzado del malagueño se marchó muy cerca del palo derecho.

Protagonismo local
Abdul-lah, justo en el ecuador del primer acto, estuvo a punto de aprovechar una indecisión de la zaga malagueña al elevar la pelota sobre la salida de Carlos, pero un defensor evitó el gol despejando a córner. El empate pudo llegar al saque de esquina cuando Ayoub conectaba un disparo raso que de nuevo se topaba con la pierna de un zaguero visitante cuando la grada ya cantaba el gol.
Sin embargo, cuando parecía que el partido estaba totalmente controlado por los de Karim y Ahmed, un error en la salida del balón de los locales lo aprovechaban los andaluces para montar un contragolpe de libro que finalizaba con un centro medido desde la izquierda de Jhony que Caturla, totalmente solo en el segundo palo, cabeceaba a placer al fondo de la red.

Partido de altos kilates
Lejos de venirse abajo, el Rusadir siguió cercando el área costasoleña buscando el tanto de la igualada. Abdul lah pudo hacerlo pasada la media hora de partido al rematar con la testa una falta botada desde el flanco izquierdo por Berru. Casi a renglón seguido, llegada la jugada clave del partido. El meta visitante Carlos arrollaba casi sobre la misma línea del área a Jessé, desbaratando una clara ocasión de gol. El colegiado melillense Abderrahim Nordin no lo dudaba y señalaba el camino de los vestuarios al arquero del conjunto malagueño que se quedaba en inferioridad numérica.
Abdul-lah era el encargado de ejecutar el libre directo con gran maestría, pero el recién salido Juan tuvo que emplearse a fondo para evitar el empate. Sin apenas tiempo para reponerse del susto, Ayoub, desde lejos, volvía a poner a prueba al cancerbero andaluz, que respondía con acierto para evitar otro gol cantado.
La cosa no quedó ahí, y el persistente acoso local tuvo su recompensa a falta de tres minutos para el descanso en una jugada en la que Álex Segura se marchó de su marcador centró atrás y el remate local era despejado con la mano sobre la misma línea de gol por Pintos. Penalti y roja directa. El Puerto Malagueño se quedaba con dos jugadores menos con toda una segunda parte por delante. Álex Segura, con gran tranquilidad y engañando al portero establecía la igualada con la que acabó el primer acto. Los locales se las prometían muy felices tras el descanso al disponer de superioridad numérica, pero el Puerto Malagueño demostró el por qué ocupa la tercera posición en la tabla. Los malagueños dieron un recital de orden y entrega y a punto estuvieron de conseguir un premio más que merecido por la actitud mostrada. Los costasoleños fueron mucho más equipo que los locales. Con dos jugadores menos, trajeron en jaque a la zaga estudiantil, que al final aprovechó la superioridad numérica y la calidad de sus hombres de ataque para sumar tres puntos que dan tranquilidad al cuadro rojinegro de cara a la recta final del campeonato.
A los cinco minutos de la reanudación, Abdul lah finalizaba en el segundo palo una buena jugada de ataque local y ponía el 2-1 en el electrónico´ronico. Sin apenas tiempo para disfrutar de la ventaja, Jhony volvía a establecer la igualada al ganarle la partida a la zaga estudiantil y plantarse ante Álex Rosa al que batía de tiro potente.
El partido ganó en intensidad. Borja pudo desnivelar la contienda al filo de la hora de juego, pero su disparo se estrellaba en el lateral de la red. Sería de nuevo Abdul lah el que adelantaría a su equipo con un disparo potente tras una serie de remates y rechaces. El inconformismo de los malagueños quedó de nuevo patente a falta de un cuarto hora para el final. Miguel hacía el tercero para los costasoleños al finalizar una buena acción atacante del equipo andaluz, y, diez minutos después, el mismo jugador llevó el asombro a la grada al anotar el segundo en cuenta particular y el cuarto para su equipo.
Fue entonces cuando el Rusadir tocó arrebato y se fue descaradamente en busca del triunfo en un final de infarto. Borja tras varios remates dentro del área, conseguiría acertar para poner de nuevo las tablas en el marcador; y, casi a renglón seguido, Borja volvía a plantarse ante Juan para conseguir el gol de la victoria con un disparo potente que se coló en la portería malagueña tras golpear en el meta andaluz.