La mayor parte entró en una zodiac durante la medianoche del viernes.
La Guardia Civil interceptó en la jornada de ayer a 17 inmigrantes subsaharianos que llegaron a Melilla por vía marítima en dos entradas independientes. Entre las personas que entraron en a la ciudad se encontraban cuatro menores de edad y cinco mujeres, una de ellas embarazada.
Fuentes de la Delegación del Gobierno informaron de que la entrada más importante tuvo lugar en torno a la medianoche de ayer, cuando una zodiac a motor llegó al puerto comercial de Melilla con 16 inmigrantes de origen subsahariano a bordo.
De los ocupantes de la embarcación, ocho eran varones, cinco mujeres –una de ellas embarazada– y tres menores de edad, que se encontraban en buen estado de salud y no necesitaron asistencia sanitaria cuando fueron interceptados por la Guardia Civil ya en tierra.
La segunda entrada se produjo a las 6:18 horas de ayer, cuando un subsahariano menor de edad llegó a nado con la ayuda de un flotador a la zona de Aguadú, en el Dique Norte de Melilla, momento en el que fue avistado por una patrulla rural de la Benemérita.
Este inmigrante tampoco requirió asistencia sanitaria, por lo que fue trasladado directamente a las dependencias de la Jefatura Superior de Policía para tramitar los correspondientes expedientes de expulsión del territorio nacional, en cumplimiento con la Ley de Extranjería.
Una vez solventado este trámite burocrático, los subsaharianos fueron trasladados al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que tiene una ocupación cercana a 680 personas, muy por encima de las 480 plazas de capacidad máxima con las que cuenta.
De este modo, se siguen sucediendo las entradas de inmigrantes en la Ciudad Autónoma por vía marítima,ya que en las últimas semanas se han producido llegadas por los diques que separan Melilla de Marruecos.
Normalmente, los inmigrantes que han entrado en la ciudad eran de origen subsahariano, y utilizaban para llegar a tierra embarcaciones hinchables de juguete.