Las tareas de rescate se vieron dificultadas por la fuerte marejada. La Guardia Civil rastreó la dársena melillense, pero descartó que algún inmigrante se hubiera caído de la embarcación.
A pesar de la fuerte marejada de levante, once inmigrantes subidos a bordo de una potentee zodiac consiguieron llegar a Melilla en la mañana de ayer. Arribaron a la playa de Los Cárabos ocho hombres, dos de ellos menores de 15 ó 16 años de edad, y tres mujeres, una de ellas embarazada, según informó la Delegación del Gobierno en una nota de prensa.
Las malas condiciones de la mar dificultaron las tareas de rescate por parte de la Guardia Civil. El Grupo Especializado en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Benemérita rastreó la dársena melillense ante la posiblidad de que algún inmigrante hubiera caído de la embarcación, pero poco después se descartó que algo así se hubiera producido, pues “no se localizó a ningún ocupante accidentado”.
Y es que la zodiac en la que viajaban los once inmigrantes estaba equipada con un potente motor fueraborda de 90 caballos de potencia de la marca Yamaha. La Delegación destacó que este tipo de embarcaciones, concretamente, el potente motor de marca Yamaha es “muy costoso”.
En torno a las 7:00 horas la Guardia Civil avistó la embarcación cuando ésta se dirigía desde mar abierto hacia la costa melillense. Además, las autoridades del Instituto Armado recibieron una llamada de emergencia de un ciudadano que también había avistado la embarcación acercándose al litoral melillense.
Dadas las dimensiones de la zodiac, nueve metros de eslora, se calculó que podrían ir a bordo unas veinte personas, de ahí que el GEAS rastrearan el agua en busca de algún ocupante que hubiera podido caer. Sin embargo, solamente interceptaron a once.
El mal estado de la mar impidió al GEAS salir de inmediato, por lo que la unidad optó por trasladarse por tierra hasta la bocana del puerto para iniciar la operación de rastreo. Los once inmigrantes, de origen subsahariano, fueron auxiliados por los agentes de la Guardia Civil con mantas términas, pero dado el buen estado de salud que presentaban no fue necesario su traslado a dependencias hospitalarias.
La Delegación hizo hincapié en el “extremo riesgo” de la operación de salvamento, tanto en la tarea de rastreo como de auxilio a los inmigrantes que iban a bordo de la patera.
Una vez encallada la zodiac en la playa de Los Cárabos, la Guardia Civil dio cuenta de que en la misma había dos garrafas de combustible y un flotador de grandes dimensiones, “presumiblemente añadido por las mafias que se lucran con los inmigrantes, con el fin de asegurarles un asidero para el caso de que la fuerte marejada volcase la barca”, explicó la Delegación del Gobierno.
Una vez que los inmigrantes fueron socorridos por las autoridades españolas, las labores de rescate de la propia embarcación también se vieron complicadas por las malas condiciones del mar. El GEAS no pudo trasladar la zodiac mar adentro para ser remolcada, después de encallar en la arena de la playa, por lo que ésta tuvo que ser arrastrada con cabos de cuerda hasta la orilla para poder desmontarla y transportarla hasta instalaciones oficiales dependientes de la Guardia Civil.
Un melillense, detenido por integrar una red de tráfico de armas y droga
La Policía marroquí desmanteló en Nador una banda criminal que introducía en Marruecos armas de fuego y cocaína desde la Melilla, según un comunicado del Ministerio del Interior aluita difundido por la agencia MAP. La banda tenía actividades en el tráfico de hachís de Marruecos a Europa y de cocaína a la inversa y contaba en su haber con varios robos con violencia, agresiones armadas y robo de vehículos. Según el comunicado, que no precisa el número de detenidos ni la fecha de los arrestos, un melillense de origen marroquí ha sido detenido e identificado como la persona que se encargaba de aprovisionar a los miembros de la banda de armas de fuego. Las actividades de esta organización delictiva habían creado alarma entre la población nadorense después de que llegasen al punto de asesinar a una persona, según el mismo comunicado. En la operación, la Policía marroquí se incautó de varias armas de caza, armas blancas (incluidos sables), una bomba lacrimógena, un lote de cartuchos de 12 milímetros, varios automóviles en situación irregular, un alijo de hachís y otros objetos robados.