Después de casi dos meses de acampada a las puertas del Hospital Comarcal, las limpiadoras de este centro interrumpen la protesta hasta el próximo mes de septiembre a la espera de que la Inspección de Trabajo resuelva su reclamación para que se revisen sus contratos.
La secretaria de Acción Sindical de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo (FeSMC) de UGT, Dolores Bueno, ha agradecido el apoyo prestado durante todo este tiempo y espera que la resolución sea favorable.
Las trabajadoras piden el fin de la brecha salarial con sus compañeros varones, que cobran 92 euros más que ellas por el mismo trabajo, y también una subida de las nóminas para toda la plantilla.
Las limpiadoras iniciaron la acampada el pasado 2 de mayo y el cansancio ha hecho mella en ellas y también en sus familias. Aunque la lucha empezó a finales de marzo, cuando comenzaron protestas diarias a la hora del desayuno a las puertas del hospital.