Miranda defiende la gestión de su Consejería y resalta la labor que se realiza en Educación Infantil, donde tiene competencias. La segunda interpelación del Grupo de Populares en Libertad instó al Gobierno local a liderar un Plan Global por la Educación que complemente, compense y enmiende los “errores” del Ministerio de Educación en Melilla. Su portavoz, Julio Liarte, lamentó que la Ciudad Autónoma siempre obtenga los peores resultados en fracaso escolar o calidad educativa. “¿Qué estamos haciendo mal?¿Cómo podemos rectificar para salir de esta situación?”, se preguntó Liarte.
El diputado de PPL reconoció que si bien es cierto que la Ciudad Autónoma no tiene las competencias de Educación para actuar directamente sobre estos problemas, sí puede reforzar las actividades educativas complementarias. Para Liarte, la inversión que el Gobierno local destina a Educación o actuaciones de carácter educativo podrían encauzarse en ese Plan Global para “hacer más cosas y complemetar las que realiza el Ministerio”.
Liarte cifró en 9,7 millones de euros la partida que se dedica a la Consejería de Educación, UNED y programas de formación de la Unión Europea. Con ello, PPL considera que se puede enmendar los “errores” del Ministerio de Educación con actuaciones que permitan una formación al alumnado melillense “para solucionar sus problemas futuros y ser ciudadanos libres para ejercer su derecho al voto”.
Por su parte, el consejero de Educación, Antonio Miranda, defendió la gestión de su área en los ámbitos en los que tiene competencia, como es el caso de la Educación Infantil. Las escuelas infantiles que atienden a 355 niños, las ludotecas, las ayudas para la compra de libros, material escolar, las prácticas profesionales que realizan alumnos del Campus Universitario, las escuelas de verano, los talleres de inglés y la educación de adultos son algunas de las áreas en las que actúa la Consejería de Miranda. “Al menos con este trabajo desde edades tempranas estamos ayudando a prevenir el fracaso escolar”, razonó Miranda.