El individuo se resistió fuertemente a la detención, llegando a causar lesiones a un agente
Esta semana compareció ante el juez titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Melilla un individuo que fue condenado a seis meses de prisión por delitos contra la seguridad vial, resistencia y lesiones. El procesado reconoció su culpabilidad en el juicio, que se celebró el miércoles. Según se relata en el escrito acusatorio del Ministerio Fiscal, el hombre condujo un vehículo sin carnet, a gran velocidad, en sentido contrario y acabó colisionando con un coche de la Policía Nacional.
Sucedió el 27 de febrero de 2015, sobre las 15:30 horas. Aquel día, el acusado conducía un automóvil sin permiso para ello y a gran velocidad por la calle Fernández Cuevas. Al ser divisado por los agentes de la Policía Nacional, estos activaron los dispositivos acústicos y luminosos e iniciaron una persecución para darle el alto.
Huye de los agentes
De acuerdo con lo expuesto en el escrito de la fiscal, el encausado hizo caso omiso a los agentes y continuó su marcha por la carretera Alfonso XIII. Entonces, tomó el carril contrario, llegando a derrapar debido a la gran velocidad a la que circulaba. Acto seguido, tomó la carretera de Farhana, accediendo a la rotonda en sentido contrario.
Luego, siguió por la carretera de Hidum, donde realizó un giro brusco que lo llevó a colisionar contra un vehículo policial, un contenedor de basura y un coche que permanecía estacionado en la calle, según plasma la fiscal en el escrito acusatorio.
En ese momento, los agentes procedieron a la detención del procesado, que se resistió fuertemente a la misma y acabó lesionando a uno de los policías en una mano. Los daños ocasionados en el vehículo policial fueron tasados en la cantidad de 1.582 euros.
El procesado también provocó destrozos en el mobiliario urbano de la Ciudad Autónoma.
El encausado decidió reconocer los hechos el día de la vista. Por ello, su letrado llegó a un acuerdo de conformidad con el Ministerio Fiscal, que accedió a rebajarle la pena solicitada al mínimo contemplado en el Código Penal, por su predisposición a colaborar con la Administración de Justicia.
De este modo, la fiscal modificó las penas y finalmente le reclamó seis meses de cárcel por un delito contra la seguridad vial, así como una multa de 2.160 euros por conducir sin el permiso para circular. Además, pidió para el acusado una multa de 1.080 euros por un delito de resistencia a la autoridad y otra sanción de 90 euros por las lesiones que ocasionó a un policía.
Suspensión de la pena
La representante del Ministerio Público, por su parte, se opuso a la posibilidad de suspender el ingreso en prisión del acusado. Esta concesión puede darse cuando la persona procesada es condenada a una pena inferior a los dos años de prisión y carece de antecedentes penales. No obstante, la fiscal argumentó en la sala que el individuo contaba con otros antecedentes penales, también por un delito contra la seguridad vial, por conducir bajo la influencia de bebidas alcóhicas.
Su letrada, sin embargo, solicitó al juez que se concediera al procesado la suspensión de su ingreso. Al respecto, el titular del Penal número 1 de Melilla señaló que este era un punto que quedaría pendiente de resolverse. Asimismo, indicó que, de no estar de acuerdo con su decisión, podría recurrirla ante la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Málaga, con sede en nuestra ciudad.
Finalmente, el individuo manifestó en sala que estaba totalmente conforme con las penas solicitadas por parte de la fiscal. Dicho esto, el juez pronunció el dictado de una sentencia condenatoria.