La afluencia de personas que acuden para identificarse es mayor de lo habitual, a causa de las recientes entradas masivas según fuentes de la Policía Nacional. Las últimas llegadas de inmigrantes por vía irregular a la ciudad autónoma han provocado la saturación de las oficinas de la Jefatura Superior de Policía Nacional donde se identifica a las personas de este colectivo recién llegadas a Melilla, según comunicaron en la jornada de ayer fuentes del Cuerpo a este periódico.
Desde comienzos de semana, todos los días se forman largas colas de inmigrantes, la mayor parte de origen subsahariano, que acuden a las dependencias de la Policía Nacional de manera voluntaria para su identificación según lo establecido en la Ley de Extranjería. Asimismo, se les abre el correspondiente expediente de expulsión.
La escena que se ha visto en los últimos días a las puertas de Comisaría no es poco habitual, aunque las fuentes de este periódico señalaron que el número de inmigrantes es mayor que en otras ocasiones a causa de las últimas entradas ilegales en la ciudad.
Según detallaron desde la Delegación del Gobierno en Melilla, los agentes identifican a los inmigrantes, aunque en ocasiones éstos evitan facilitar su país de procedencia con el ánimo de entorpecer el proceso de repatriación. No obstante, el Cuerpo cuenta con especialistas en esta materia para determinar cuál es la procedencia de los afectados.
Muchos de los que acuden estos días a la Jefatura para tramitar su identificación son inmigrantes llegados por cauces irregulares que aún no habían sido localizados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Hay que recordar que esta gestión es indispensable para acceder al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
Por otro lado, desde Delegación señalaron que en algunos casos puntuales se traslada primero a los inmigrantes al centro y al día siguiente se les indica que deben acudir a las dependencias policiales para identificarse.
En cualquier caso, las fuentes de El Faro indicaron que las últimas entradas han provocado que día a día se formen largas colas a las puertas de Comisaría y que los servicios administrativos de la Policía tengan que trabajar denodadamente para atender a todos los afectados en el menor tiempo posible.
La entrada masiva de subsaharianos también ha provocado la saturación del CETI, que actualmente alberga a unas 900 personas, muy por encima de su límite, estipulado en unas 480.