Desde el Ministerio aseguran que los trabajos están fuera del dominio público marítimo terrestre.
Las obras de la playa de la Ensenada de los Galápagos, que en teoría iban a estar terminadas hoy, dependen de la Consejería de Medio Ambiente, que dirige José Ángel Pérez Calabuig, según han confirmado a El Faro desde la Secretaría de Estado de Medio Ambiente.
A principios de esta semana el coordinador local de UPyD Emilio Guerra colgaba un ‘tuit’ en el que se preguntaba cuándo iba a estar disponible al baño la playa de la Ensenada de los Galápagos, a las faldas de la zona amurallada de Melilla la Vieja.
Este periódico se puso en contacto con el consejero Calabuig, que aseguró a El Faro que había visitado las obras el viernes pasado y estaban sólo a falta de repasar “el arco de ladrillos vista”.
En su opinión, esos trabajos terminarían “esta semana” y aclaró a El Faro que no podía dar más detalles al respecto porque se trata de una intervención que depende de “Fomento”.
Desde el Ministerio del Fomento negaron la mayor y también lo hicieron desde el Ministerio de Agricultura, Agua y Medio Ambiente. Sin embargo, este último tuvo a bien aclarar a El Faro que “las obras que se están llevando a cabo en esta playa las lleva a cabo la Consejería de Medio Ambiente de la Ciudad Autónoma de Melilla y se encuentran fuera del dominio público marítimo terrestre, ámbito de actuación de la Demarcación de Costas”.
También añadieron que se están realizando “reparaciones del paramento de la muralla de la antigua ciudadela”.
En cualquier caso, hay que recordar que la playa de la Ensenada de los Galápagos se cerró al baño en el verano de 2012 tras producirse desprendimientos de la zona amurallada de Melilla la Vieja. Esta situación se había registrado en ocasiones anteriores y también en esos casos se restringió la zona de baño.
Dos años después, la playa de Los Galápagos está a punto de abrir al baño este verano en cuanto la Consejería de Medio Ambiente certifique el fin de los trabajos de rehabilitación que se han llevado a cabo en la zona.
Las playas de la ciudad, sin la Q de Calidad Turística
Las playas de Melilla llevan desde el año 2011 sin recibir el reconocimiento de calidad turística que concede el Instituto de Calidad de España.
La ciudad únicamente consiguió este ‘premio’ en los años 2009 y 2010, según los datos del propio Instituto.
Se trata de la Bandera ‘Q’ de Calidad Turística, que se obtiene al cumplir los requisitos recogidos en la norma UNE 187001:2011. En ella existen tres tipos de parámetros a cumplir en base a estándares de gestión, de servicio, de infraestructuras y equipamientos.
El Instituto para la Calidad Turística de España valora, por ejemplo, la política de calidad del ente gestor, cuál es el plan de formación de empleados, cómo se hacen las auditorías internas, la coordinación y comunicación interna, la gestión de quejas y reclamaciones de los usuarios, la mejora continua, la identificación y evaluación de aspectos ambientales y de riesgos higiénico–sanitarios, entre otros.