Las lecciones de Calderón

El consejero de Seguridad Ciudadana, Javier Calderón, lo volverá a intentar. Dentro de siete días, el próximo sábado, los coches desaparecerán de la Avenida Juan Carlos I para llenarse de peatones

. Éste será el acto central de la Semana de Movilidad.
No es la primera vez que el consejero Calderón lleva a cabo este tipo de iniciativas. En la ocasión anterior logró vaciar de vehículos la principal calle del centro de la ciudad, lo que no necesitó más que dar las pertinentes órdenes a los agentes de la Policía Local. Sin embargo, no se consiguió el segundo objetivo: Llenar de actividad la Avenida. La deficiente promoción, la inexistencia de un programa de actividades y el poco entusiasmo de los comerciantes y hosteleros hicieron que la iniciativa pasara prácticamente desapercibida para los peatones o despertara en ellos muy poco interés.
Al analizar los sucesos ocurridos en la madrugada del sábado al domingo que cerraba la Feria de este año, el consejero señaló que aquellos hechos debían servir de lección para el próximo año. El escaso éxito del anterior cierre al tráfico de la Avenida debería tener el mismo fin: Aprender y rectificar para no volver a caer en el mismo error. Dentro de una semana podremos comprobar las enseñanzas que Javier Calderón sacó de aquella experiencia.
También se puede aprender algo del enésimo apedreamiento sufrido por un autobús de la COA. La primera lección es que ninguna de las medidas puestas en marcha hasta ahora por la Consejería de Seguridad Ciudadana ha servido para nada. Los lanzamientos de piedras continúan sin que la Policía consiga detener a alguno de los gamberros, con el consiguiente riesgo que siguen corriendo tanto los conductores como usuarios de la COA. Calderón anunció que volverá a reforzar la presencia policial en los próximos días, volverá a reunirse con el delegado del Gobierno y volverá a cambiar impresiones con los responsables de la Jefatura Superior de Policía, medidas todas ellas que no han servido hasta ahora para que no vuelvan a producirse apedreamientos.
También han vuelto a aparecer los ‘taxis piratas’ y los mecánicos ilegales. En realidad, los primeros nunca han llegado a irse. Sólo se tomaron un día de vacaciones tras hacer el agosto durante la Feria a costa de la COA. De hecho, el día que los ‘piratas’ no ‘trabajaron’ en algunas paradas se podían ver unas desconocidas colas de viajeros esperando la llegada del autobús. Tal vez se vean unas colas similares de vehículos ante los talleres si en alguna ocasión los mecánicos ilegales también deciden tomarse el día libre; quizá la celebración de la Semana de la Movilidad sea un buen momento. Mientras unos descansan, otros pueden empezar a repasar todas esas lecciones pendientes con las que otra vez empiezan el curso.