De enero último a mediados de este mes de marzo, se ha registrado un incremento en las entradas irregulares por mar y por tierra a Melilla, según datos publicados por el Ministerio del Interior.
Así, se han contabilizado hasta el momento 43 entradas por mar a la ciudad, que el año pasado no había experimentado ninguna a 15 de marzo.
Sin embargo, en Ceuta, estos ingresos marítimos han disminuido un 72,1%, al acumular 19 en lo que va de año, 49 menos que en 2021, de acuerdo con las cifras citadas por EFE.
Por vía terrestre, saltando la valla fronteriza, en 2022 han entrado irregularmente en ambas ciudades autónomas 1.022 personas, 721 más que el año anterior, lo que supone un alza del 239,5%.
Del mismo modo, desde el 1 de enero de 2022 han entrado de manera irregular por las costas españolas 7.254 inmigrantes en 276 pateras, lo que supone 2.877 más que en el mismo período del año pasado (65,7%).
La llegada de pateras se frena en marzo
Por otro lado, EFE resalta que Canarias recibió durante la primera mitad del presente mes una sola patera con 56 ocupantes, lo que muestra un parón en la Ruta Atlántica que no ocurría desde la misma quincena de marzo de 2020, en los días previos al inicio del confinamiento.
En aquella fecha de 2020 llegaron a las islas 49 personas en tres pateras, que elevaron el acumulado de entradas irregulares por mar a Canarias hasta entonces a 1.230 personas.
No obstante, el total de 5.552 personas llegadas del 1 de enero al 15 de marzo último a través de la llamada Ruta Canaria evidencia niveles no vistos desde la crisis de los cayucos de 2006. De hecho, esa cifra dobla la de 2021, cuando en estas fechas se contaban 2.580.
Por eso, es llamativo para las distintas organizaciones que trabajan con inmigrantes el freno en el arribo de pateras en las últimas semanas. Es más, hasta el rescate de la referida neumática con 56 personas (33 hombres, 18 mujeres y cinco niños) en Fuerteventura el 9 de marzo, hacía 13 días que no había arribos a las costas de Canarias; y desde entonces, hasta este 17 de marzo, no ha habido ninguno más.
Sin embargo, esto no supone que la Ruta Atlántica no pueda reactivarse en los próximos días, como lo hizo en 2020, ni tampoco que no esté habiendo salidas.
Las salidas hacia Canarias continúan
En la actualidad, muchos jóvenes africanos continúan esperando sobre todo en las costas de Marruecos y el Sáhara, o incluso más al sur, la oportunidad para cruzar a Canarias, y algunos lo siguen intentando, a veces con consecuencias trágicas.
Lamentablemente, 44 personas, entre las que se contaban varios bebés, murieron el pasado 12 de marzo cuando naufragó una patera cerca de las costas de Tarfaya que, presumiblemente, se dirigía a Fuerteventura, la isla más próxima (a 103 kilómetros) a esa localidad marroquí.
Pero, las cifras del Ministerio del Interior reflejan que, después de haber alcanzado un pico en la segunda mitad de enero (unas 150 personas diarias), el número de llegadas de inmigrantes a Canarias llevan mes y medio desacelerándose.
En concreto, durante la primera quincena de enero llegaron 790 personas en 19 pateras y en la segunda, 2.404, en 52 barcas.
Por su parte, en la primera mitad de febrero, arribaron 1.559 personas en 30 pateras; en la segunda, 743, en 14 barcazas. En lo que va de marzo, como ya se ha dicho, se cuenta solo el ingreso de 56 personas en una zódiac.
Menos arribos a la península y Baleares
En el caso de la península y Baleares, las llegadas de inmigrantes en patera se encuentran a la baja.
Del 1 de enero al 15 de marzo alcanzaron la costa o fueron rescatadas en esa zona 1.640 personas en 153 pateras, 89 personas menos que en 2021 (-5,1%).
No obstante, el balance del conjunto de España en el primer trimestre de 2022 sigue condicionado por las cifras acumuladas de Canarias, que, a pesar de su reciente desaceleración, son elevadas.