Las aventuras y desventuras del constitucionalismo en nuestro país

El presidente del Consejo Consultivo de Andalucía, Juan Cano Bueso, dirige este curso.

‘Dos siglos de constitucionalismo en España’ es uno de los cursos que se imparte esta semana en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Melilla.  ‘La continuidad y discontinuidad en la historia constitucional española’ fue la primera conferencia ofrecida ayer por parte del vicepresidente primero del Senado y catedrático en Derecho Constitucional, Isidre Molas i Batllori. Además, el  también catedrático de Derecho Constitucional, Antonio Torres del Moral, cerró la mañana con una ponencia bajo el título ‘Del Antiguo Régimen al constitucionalismo liberal: la Constitución de 1812’.
“Se trata de hacer una exploración por la historia constitucional española. El próximo año se celebra el bicentenario de la Constitución de Cádiz que es la que abre este periodo”, comentó el director del curso y presidente del Consejo Consultivo de Andalucía, Juan Cano Bueso.

La Constitución de 1812

“Es una constitución que surge con una gran ilusión, pegada al liberalismo y a las teorías progresivas de la época y que se va progresivamente derruyendo, siendo más conservadora, para finalmente acabar en los años 30 agotada y sin resolver los grandes dilemas que España había padecido en el siglo XIX”, apuntó Cano Bueso sobre la Constitución de 1812 que fue redactada en la ciudad de Cádiz.
Entre los temas que no se resolvieron durante los siglos XIX y XX, Cano Bueso apuntó la separación de poderes entre la vida civil y la Iglesia, el asentamiento de la monarquía frente a la república y la construcción de un consenso básico internacional que impidiera el agotamiento del régimen.
“Hemos accedido a una parlamentarización de un sistema político de forma tardía y sólo a partir de 1978 hemos conseguido resolver los viejos dilemas que la alternancia, el efecto perdurar del constitucionalismo, progresista y conservador no consiguió en el siglo XIX”, apuntó el coordinador del curso.
Por otro lado, el presidente del Consejo Consultivo de Andalucía aseguró que los constituyentes de 1978 tuvieron en cuenta conocer muy bien la historia para diagnosticar los problemas y no volver a repetir los errores del pasado.
Además, Cano Bueso comentó que dentro de estas conferencias se estudiará de una manera singular la posición de Melilla en la historia de la Constitución española. Unos datos no muy conocidos fuera de la ciudad y que pueden ser una buena aportación para los estudios del constitucionalismo español.

Más conferencias

El curso continua hoy con el catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Jaén, Gerardo Ruiz, quien hablará sobre ‘Las claves constitucionales del reinado de Isabel II’ y la conferencia del catedrático de la Universidad Rey Juan Carlos, Enrique Álvarez Conde, sobre ‘La restauración canovista: la Constitución de 1876”.

¿Es necesario reformar la Constitución de 1978?

El presidente del Consejo Consultivo de Andalucía y director del curso, Juan Cano Bueso, aseguró que es partidario de una reforma en la Constitución,
“porque tiene una serie de cláusulas estériles, como todo lo que tiene que ver con los procesos autonómicos y su construcción. También sería posible la revisión de Ceuta y Melilla como ciudades autónomas y dar un paso más en su propio autogobierno”, aseguró.
“Hay que hacer un revisado en profundidad en cuanto a las competencias del Estado en referencia a las Comunidades Autónomas para una puesta al día, porque ha habido muchos cambios en estos 30 años y conviene ajustar el funcionamiento de un Estado, de por sí, muy complejo y que ha producido en España las cuotas más altas de bienestar, democracia y de autosatisfacción de los ciudadanos”, comentó Bueso afirmando que hay dificultades por la descentralización de competencias.