Los comerciantes y vecinos del Rastro comparten la misma opinión: el barrio necesita reformas urgentemente, no sólo para atraer consumidores a los establecimientos, sino también para mejorar la calidad de vida de todos sus residentes.
El comerciante Yamal Sel-lam regenta un local multiprecios en el Rastro, donde vende toda clase de artículos, desde perfumería hasta alimentación. Sel-lam ve positiva la iniciativa que quiere desarrollar Promesa (Proyecto Melilla, S.A.), ya que “la zona del Rastro está bastante abandonada, necesita inversión para modernizar y mejorar sus infraestructuras”.
Carencias
Sel-lam enumera para El Faro una serie de carencias que cree que la Administración debería cubrir para impulsar esta zona y adecuarla a las “necesidades básicas”. Así, el barrio necesita “vigilancia policial que controle la venta ambulante y zonas verdes y de ocio para pasear”. El comerciante también se queja de la “falta de limpieza” en un sitio donde “el olor a pescado es insoportable” debido a la venta ilegal. Todos estos aspectos hacen que “la zona esté aislada” y “la gente no la vea tractiva”, por lo que “muchos locales están vacíos o en traspaso”, comenta Sel-lam.
El barrio necesita más vigilancia, zonas verdes
para pasear y mejorar la limpieza de las calles
Este vendedor no está solo. El también comerciante Miguel Fuentes considera que el proyecto de mejora del barrio puede ser “muy útil, sobre todo para los comercios más antiguos que necesiten una remodelación”, aunque Fuentes recuerda que “hay que agilizar el comercio en la frontera” y “evitar sucesos como el de la porteadora de Ceuta”.
Competencia
Said Kanagush es el propietario de un restaurante Picasso. Kanagush asegura que “es bueno que se ayude a la gente y se arreglen los locales” porque “muchos están viejos, especialmente por dentro”. Así, “vendría más gente” aunque “faltan vigilantes en la plaza, siempre hay accidentes”.
Tiendas de toda la vida han cerrado por
la apertura de grandes supermercados
Por su parte, el repartidor Mohamed Malik lamenta que el pequeño comercio se vea afectado “por la apertura de grandes supermercados” y que “la crisis haya tocado a las tiendas del barrio”, además “la gente ahora sólo compra lo básico”. El vendedor Manuel Marco comparte la opinión de Malik. Cree que el proyecto “rehabilitará el mercado, que está muy decaido por la competencia”.
Inversión
Promesa pondrá en marcha un programa de rehabilitación de los comercios del Rastro dotado de 18.000 euros para dinamizar la zona y revitalizar las tiendas del barrio.
Infraestructuras
Este proyecto de mejora de los servicios y de los establecimientos viene impulsado por la futura apertura del Conservatorio de Música de Melilla y de la Escuela Oficial de Idiomas en el edificio histórico del mercado del barrio.
Planes personalizados
Inicialmente, un total de 20 pequeños negocios disfrutarán de un programa personalizado para mejorar las instalaciones de sus establecimientos, modernizarlos y hacerlos más atractivos para el público.
Mejoras
Los comerciantes reclaman aumentar la vigilancia policial, instalar zonas verdes y de ocio para pasear y mejorar los servicios de limpieza para acabar con el mal olor de las calles.
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