El Melilla Baloncesto sufrió su décima derrota de la temporada en un agónico encuentro a domicilio ante uno de sus rivales directos, el Clínicas Rincón Axarquía. Tras un inicio en tromba de los locales que llevaron el marcador hasta el 18-7 a los dos minutos y medio, el choque se mantuvo en todo momento con un resultado muy igualado. A partir de ese momento apretó el conjunto visitante (19-18) que logró en algunas fases del encuentro una renta que llevó a los siete puntos. El último cuarto fue una constante de igualdad máxima en el luminoso (53-53, 55-55, 57-57, 60-60, 62-62, 64-64) hasta que en los últimos minutos ambos conjuntos alternaron canastas. Melilla se puso uno arriba (67-68) a falta de 28 segundos con una canasta de Almazán pero dos tiros libres de Guillén dieron la vuelta al marcador (69-68). Riera falló el último intento y el triunfo se quedó en tierras malagueñas.
Ambos clubes perseguían comenzar el año nuevo con una victoria que les inyectara un ápice moral de cara al resto de la temporada. Mucho ha llovido ya desde aquel 4 de octubre, la primera jornada de la LEB Oro en la que el Baloncesto Melilla venció al Clínicas Rincón por 70 a 66. Los de Francis Tomé afrontan el primer partido del año con la moral intacta pese a las dos últimas derrotas del equipo. Sus resultados -5 victorias y 8 derrotas- les colocaban en el décimo puesto de la clasificación, dos escalones por encima de los de Alejandro Alcoba. El Melilla Baloncesto no había completado una buena primera vuelta de la LEB Oro. Llegaban a Carranque con 9 derrotas y tan solo 4 victorias. Confiaban en plantear un partido muy directo frente a un rival que puede estar peleando a final de temporada y con un nivel de juego muy igualado.
En el primer cuarto, el Clínicas Rincón salió muy encarado a conseguir la máxima diferencia (llegando a un 18-7) y ejecutando una presión prácticamente a toda pista que hostigaba a los de Alejandro Alcoba. Pese a ello, Wright conseguida hacer daño en la zona de los costasoleños e internarse en un par de ocasiones singulares. Guillén fue el mejor de este período, como ya advertía el entrenador melillense antes del inicio del encuentro.
Los melillenses empezaron con poco acierto, aunque la fuerza de los pivots -especialmente Busma- fueron muy importantes para la mejoría de estas anotaciones. El Clínicas, y sobre todo Ricardo Guillén, forzaba muchas personales que alcanzaban el bonus de equipo muy temprano a los de Francis Tomé. Los malagueños intentaban increpar desde la línea de tres sin éxito antes de llegar a un tiempo muerto que dejaba a los melillenses por encima (19-22). Los pupilos de Alejandro Alcoba se llevaban los rebotes por altura, mientras que el Clínicas comenzó la táctica de los dos bases: Pozas y Díaz. Al descanso, un muy superior Melilla y un Clínicas muy poco defensivo (28-33).
Fue en el tercer cuarto donde los costasoleños pudieron recortar severamente la distancia de puntos con el Melilla. Un Dejan Todorovic muy competitivo y un Joan Riera que dejaba mucho esfuerzo en pista. Esta vez, el conjunto visitante encontró el acierto desde la línea de 3 (llegando al último cuarto con un porcentaje muy superior al del Clínicas) pese a que la gran trama defensiva de los de Tomé hacían lo posible para rebotear desde la defensa. La importancia de los pivots de ambos conjuntos (Guillén y Busma) hicieron que se anotasen pocos puntos en este periodo, aunque la mayoría salían del movimiento de pies de ambos bajo aro.
Perdió el Melilla en el último acto el acierto que tanta ventaja le ofreció en cuartos anteriores, mientras que un Clínicas liderado por Pepe Pozas y Alberto Díaz recortó (49-53) e incluso empató más adelante el encuentro. Se perdió por unos primeros minutos de este período la fuerza con la que el Melilla superó a la defensa malagueña en el segundo y tercer cuarto. La vitalidad de Riera desde la zona de triple contrastada con la expulsión de Busma por acumulación de faltas fueron clave en el conjunto de Alcoba. Wright, que comenzó de una manera muy eficaz, no se dejaba ver al término del encuentro.
Hasta el último minuto estuvieron ambos conjuntos debatiéndose la victoria. Fueron muy relevantes los diversos tiempos muertos que ambos conjuntos solicitaban en el último minuto en Carranque. El partido concluyó con una falta de Manzano que ofrecía dos tiros libres al Clínicas que les puso un punto por delante. El Melilla, con la última posesión, no superó la gran trama defensiva de un Alberto Díaz muy bien situado. El final: 69-68.
CLÍNICAS RINCÓN AXARQUÍA: Conde (8), Todorovic (13), Alberto Díaz (9), Sabonis (3), Guillén (20), -equipo inicial-, Pozas (9), Soluade (5), Víctor Ruiz, Gutiérrez, Nguirane (2).
CLUB MELILLA BALONCESTO: Riera (16), Manzano (10), Almazán (11), Narros (2), Busma (10), -equipo inicial-, Fuentes (4), Brothers (3), Wright (6), Pino (2), Durley (4).
Árbitros: Morales García-Alcaide y Bey Silva. Eliminaron a los locales Todorovic y Nguirane y al visitante Busma.
Incidencias: Pabellón de Carranque. 600 espectadores.
Parciales: 18-11, 10-22, 16-18, 25-17.
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