El delegado del Gobierno aseguró que no tiene inconveniente en que se instale un alambre en la parte superior de la valla.
El delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, anunció ayer que la valla fronteriza entre Melilla y Marruecos será reforzada con una malla que impedirá a los inmigrantes escalar. Éste fue uno de los temas que abordó en la reunión que mantuvo el lunes con el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, en Madrid. Aseguró que en poco tiempo este proyecto se plasmará en “un documento”, pero apuntó que aún no se ha estimado el presupuesto con el que se contará para realizar esta reforma en el perímetro fronterizo de la ciudad.
Otro de los asuntos que trató con Fernández de Mesa, fue la funcionalidad de la sirga, el elemento instalado tras las avalanchas de 2015 y que conforma un obstáculo de cables de acero entre las dos vallas. El Barkani explicó que los técnicos están estudiando la idoneidad de este sistema, ya que deben analizar si realmente evita que los inmigrantes salten o favorece su paso a Melilla.
En este sentido, Fernández de Mesa ya apuntó hace unas semanas que la sirga tridimensional dificultaba la patrulla de los guardias civiles entre las dos vallas. Incluso, señaló que desde hacía unos años no se habían realizado inversiones en la mejora de la frontera por parte del PSOE, algo que estaba corrigiendo ya el nuevo gobierno del PP.
El Barkani afirmó además que aún no se ha decidido nada sobre si la sirga tridimensional se elimina o no de la valla de Melilla. Señaló que de momento se están analizando las posibilidades para mejorar la idoneidad del sistema que impide a los inmigrantes pisar tierra española, así como cuándo se llevarían a cabo ésta y otras medidas.
Un alambre en la parte superior
Entre las modificaciones posibles en la valla de Melilla está un cambio en la parte superior, los fuelles que inicialmente se colocaron para dificultar el salto. El delegado explicó que ahora sirven para que los inmigrantes puedan pasar de una valla a otra, de la interior a la exterior, con mayor facilidad.
También se está sopesando la posibilidad de poder instalar una concertina, un alambre que coronaba las vallas. Aunque fue retirado para evitar lesiones en los inmigrantes entre el 2005 y el 2006, El Barkani afirmó que no tiene inconveniente en que se vuelva a instalar este sistema, al estar a seis metros de altura. No obstante, apuntó que no será él quien tome esta decisión.
El refuerzo de agentes
El delegado del Gobierno destacó que a lo largo de estos últimos meses se ha contado con “bastantes recursos” en cuanto al número de agentes que vigila la frontera con Marruecos. Resaltó que aún están trabajando en la ciudad un módulo de intervención rápida (MIR) de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil y apuntó que se ha llegado a doblar el número de guardias civiles especialistas en actividades subacuáticas. A estos agentes hay que sumar las tareas de vigilancia del helicóptero.
El Barkani recalcó que aunque haya críticas contra las actuaciones que realiza el helicóptero de la Guardia Civil, sirve para disuadir a los subsaharianos de que salten la valla. Señaló que también tiene una función preventiva y de diagnóstico, ya que pone en alerta del número de personas que está esperando en territorio marroquí para entrar en Melilla. Con el aviso de este helicóptero, Guardia Civil activa el protocolo de actuación en colaboración con la gendarmería marroquí, añadió el delegado del Gobierno.
No obstante, subrayó que a pesar de tener estos recursos humanos y materiales le gustaría contar con más. Pero aseveró que un refuerzo del número de efectivos en la frontera “no va a cambiar la forma de actuación de la inmigración clandestina”. “No se termina con el problema de la inmigración poniendo a un agente cada dos metros o elevando otros seis metros la valla, sino que es necesario adoptar otro tipo de medidas”.
Por este motivo, señaló la importancia de que la UE tenga mayor implicación con la frontera de Melilla y Ceuta. Aseguró que Europa ha emprendido varias políticas para controlar actividades que ponen en riesgo la seguridad de los ciudadanos, como las medidas contra el narcotráfico. Sin embargo, aseveró que es preciso que la UE esté más atenta a las dos ciudades autónomas.
Finalmente apuntó que desde que se bloqueó a las mafias la vía atlántica, a través de la que llegaban los inmigrantes a Canarias, ahora son Melilla y Ceuta las ciudades por las que intentan llegar a territorio español.
Reunión
En Madrid. El delegado del Gobierno aseguró ayer que la reunión que tuvo con el director general de la Guardia Civil fue “fructífera”. En esta entrevista se analizaron los posibles cambios que habrá en la valla de Melilla, como la instalación de una malla para evitar que los inmigrantes puedan escalar. Incluso se está planteando la posibilidad de eliminar unos muelles que hay en la parte superior de esta valla y que pueden estar favoreciendo que estas personas salten con más facilidad de la exterior a la interior. También señaló el delegado del Gobierno que no tiene inconveniente en que se instale una concertina, un alambre en la parte alta de la valla.
Más
Entrevistas. El Barkani destacó que aprovechó el viaje a Madrid para mantener varias reuniones de trabajo con las direcciones generales de la Policía o del Servicio Público de Empleo, entre otros.
A vista
De pájaro. El delegado del Gobierno aseguró que el helicóptero que vigila el perímetro fronterizo tiene varias funciones, como la de diagnóstico, ya que avisa a la Guardia Civil sobre el número de inmigrantes que pueden acercarse a la valla para intentar saltar.
Apoyo
Europeo. El Barkani destacó que ni subiendo los metros de valla ni reforzando el número de agentes se va a poder combatir con la inmigración clandestina. Por eso, pidió mayor apoyo de Europa para Melilla y Ceuta.