La UD Melilla sigue cayendo en la tabla

Atlético Baleares: Jero; Loren, David Navarro, Raúl, Ferroni (Toni Ramón, min. 39); Alarcón, Shashoua (Villapalos, min. 83), Nana, Sierra, Pastrana (Xisco, min. 92); y David Rodríguez (Javi Moreno, min. 83).

Melilla: Javi Montoya (Salcedo, min. 81); Pepe Romero (José Enrique, min. 76), Moi, Caro, Dani Martín (Gnali, min. 46); Masogo (Cotán, min. 63), José Antonio; Migue García (Siddiki, min. 46), Dani García, Sergio Pérez; y Vinicius Tanque.  Árbitro: Tárraga Lajara (Comité castellano-manchego). Enseñó tarjeta amarilla a los locales Nana y Javi Moreno y a los jugadores del Melilla Dani Martín, Gnali, Moi y Cotán.  Gol: 1-0 Alarcón (min. 15) Campo: Estadio Balear. 900 espectadores.

El Melilla cayó frente al Atlético Baleares en un partido que enfrentó a los dos equipos en peor situación clasificatoria del Grupo 2 de la Primera Federación, sin un triunfo a lo largo de las nueve jornadas previas. El equipo baleárico se estrenó y hace tocar fondo al grupo dirigido por primera vez por Juan Sabas, ya que lo deja último con sólo tres puntos.

El encuentro no comenzó bien para el cuadro melillense. Un inspirado Atlético Baleares salió en tromba a adelantarse en el marcador y fue justo lo que hizo. Le bastaron quince minutos a Alarcón para realizar una genialidad que supuso el 1-0. Aprovechó una acción de estrategia el conjunto local y el centrocampista recibió en la frontal para pegarle con su pierna izquierda. El esférico, tras golpear en el larguero, rebasó la línea de gol.

Tras el revés recibido, el Melilla decidió dar un paso adelante y las ocasiones no tardaron en aparecer. Los pupilos de Juan Sabas optaron por buscar constantemente a Vinicius Tanque, su referencia ofensiva. De esta manera, a la media hora de encuentro, el ariete brasileño dio el primer aviso con un golpeo lejano que atrapó Jero.

Poco después, la lesión del local Ferroni detuvo el encuentro por varios minutos y enfrió el partido, lo cual no ayudó al cuadro melillense. Un añadido de ocho minutos mostró el excesivo tiempo que se perdió en la primera mitad, aunque tampoco fue de provecho para los visitantes.

En el segundo tiempo, Jero, el guardameta local, se convirtió en el jugador más decisivo de su equipo, debido al cúmulo de acciones de peligro por parte del Melilla. El arquero tuvo trabajo desde el minuto 46. Primero, José Antonio probó fortuna sin crear demasiado peligro. Pero pocos segundos después, Dani García a punto estuvo de igualar el partido, en una acción en la que el cancerbero realizó la mejor parada del encuentro.

Otro de los motivos de la buena segunda parte visitante fueron Gnali y Siddiki, las dos sustituciones por las que apostó Sabas al descanso para revolucionar el juego. Pareció que el cuadro local debía emplear todas las armas a su alcance. Sorprendentemente, el partido se volvió a parar ya que saltaron los aspersores del campo, aunque se pudieron detener con relativa rapidez.

Antes de llegar a la hora de partido, Sergio Pérez pasó a ser protagonista para el Melilla, aunque esta vez para dejar servida la polémica. El jugador recibió en la banda izquierda y chutó en busca del palo derecho de la portería local. No obstante, el balón se encontró antes con la mano despegada de Loren. Pese a parecer un claro penalti, el colegiado no consideró sancionarlo como tal y ordenó saque de esquina.

El partido fue de más a menos y, poco a poco, a ambos equipos se les resistió la producción ofensiva. La excepción, un golpeo del goleador Alarcón, que intentó sorprender de nuevo a Javi Montoya, aunque con menos acierto y precisión que en el primer tiempo.

A falta de diez minutos para el final, se sumó otro obstáculo en el camino del Melilla. El portero Javi Montoya, uno de los mejores hombres del equipo en el inicio de la temporada pese a la posición en la tabla, tuvo que ser sustituido por Salcedo a causa de una lesión.

Finalmente, los visitantes se volcaron sin éxito en los seis minutos de tiempo suplementario y sucumbieron ante su rival. Delicado momento que vive el club azulino, con 3 puntos de 30 y ya farolillo rojo de la clasificación.