La UD Melilla se codea con los mejores

El cuadro dirigido por Juan Moya Toré se encuentra situado en la sexta plaza de la clasificación general del grupo IV, con un total de siete puntos, empatado con el segundo de los clasificados.

No cabe duda de que esto no ha hecho más que empezar y es pronto aún para sacar conclusiones, pero lo que no le va a quitar nadie a la escuadra melillense son los puntos que ya tiene en su haber. Nada que ver, sin querer hacer comparaciones, con la temporada pasada en el que a estas alturas de campeonato el Melilla se encontraba anclado en el fondo de la clasificación con cero puntos en el casillero, con el agravante de no saber a qué jugaba. Aunque, al final, lo importante no es cómo se empieza sino cómo se acaba por lo que habrá que esperar algunas jornadas más para ver cuál puede ser el techo de este equipo. De momento, y con menos presupuesto en cuanto a plantilla, el equipo está ilusionando a una afición, todavía escasa, que lleva marchándose muy satisfecha de la actitud del equipo en sus dos primeras comparecencias en Álvarez Claro.
La victoria ante un equipo complicado como el Cacereño, que sigue en la buena línea de la temporada pasada en la que acabó un puesto por debajo del conjunto melillense, servirá para seguir afianzando los conceptos que el técnico melillense Juan Moya está tratando de inculcar a sus discípulos. El Melilla está demostrando en este arranque liguero que tiene las ideas muy claras, además de mostrarse como un equipo ambicioso y con capacidad de reacción. Capaz de no perder la compostura a pesar de ir a remolque desde muy pronto en el marcador como ha ocurrido en los dos últimos compromisos ante el UCAM Murcia y el representante de Cáceres, en los que al cuadro unionista le faltó concentración en los primeros compases y que luego tuvo que compensar con un plus de derroche físico que más tarde puede pasar factura.
El buen rendimiento de la UD Melilla en estas primeras jornadas lo ha situado en la zona alta de la tabla, empatado con otros cuatro equipos y a dos puntos del Cartagena, actual líder del Grupo con nueve puntos sumados en los tres partidos disputados. El equipo cartagenero está cumpliendo con el guión que se le exige a pesar de no estar realizando un juego brillante.
El Real Jaén es otro de los equipos que ha tenido un inicio de dulce. Sobre todo por las buenas sensaciones que está transmitiendo el juego desplegado hasta la fecha por los hombres que dirige Manolo Herrero, que han sido capaces de perforar en siete ocasiones el marco contrario y de mantener su portal a cero, siendo el único equipo de la categoría que se mantiene imbatido.
Cádiz, San Roque y Almería B son los otros equipos que junto al jiennense forman el grupo en el que se encuentra la UD Melilla. Todos ellos sacaron adelante con solvencia sus enfrentamientos aunque cabe señalar que el conjunto de la Tacita de Plata necesitó poner toda la carne en el asador para doblegar en los últimos minutos a una Balona que tuteó durante buena parte del partido a los de Monteagudo. La escuadra albinegra, que mantiene prácticamente el mismo bloque de la temporada pasada con algunas incorporaciones importantes, será el rival al que se medirá el Melilla mañana miércoles a partido único correspondiente a la segunda ronda de la Copa del Rey. Otro hueso duro de roer para el equipo norteafricano que viaja al Municipal de La Línea con la ilusión de seguir adelante en el torneo del KO.
Por otra parte sorprende el comienzo que han tenido equipos como el Albacete, próximo rival de los azulinos en la liga, y firme candidato a pelear por el ascenso de categoría, y el Lucena, equipos que mantienen casi el mismo bloque de la campaña anterior y que andan situado por la zona baja el primero y como 'farolillo rojo' con cero puntos el segundo.
El resto en la línea de lo esperado, incluido el Arroyo CP ya que el equipo extremeño ha confeccionado una plantilla bastante competitiva por el resultado de 1-0, ante uno de los equipos sorpresas de esta primera jornada de liga como está siendo el Écija Balompié, enfrentamiento que fue muy bonito para el espectador por la incertidumbre del resultado a lo largo de los 90 minutos de este encuentro.