La UD Melilla regala dos puntos en el descuento

Habrá que esperar otra semana más para ver a la UD Melilla fuera de la zona peligrosa de la clasificación tras dejar escapar en el último suspiro una victoria que tenía en sus manos, en una acción a balón parado en la que pagaba muy caro la falta de atención.

Los azulinos se dejaron sorprender a pesar de estar advertidos del potencial del conjunto andaluz en las jugadas de estrategia ofensiva. Única arma con la que contaban los onubenses para generar algo de peligro sobre el portal de un Dani Barrio que salvaba dos remates a bocajarro en la jugada del gol ante la pasividad de sus compañeros, pero que nada pudo hacer por impedir el tanto de la igualada.
El partido tuvo dos fases bien diferenciadas. Curiosamente, paradojas del fútbol, la Unión Deportiva estuvo mucho mejor hasta que logró adelantarse en el marcador. A partir de ahí, quizá por la falta de costumbre, los azulinos se mostraron más imprecisos y pusieron más empeño en conservar la ventaja que en tratar de buscar el segundo gol para finiquitar un encuentro en el que mereció más y en el que el rival sacó petróleo de una jugada mal defendida.
De inicio, Fernando Currás apostaba de nuevo por colocar a Nando en el centro del campo además de recuperar a David Vázquez para el once inicial. Chupe, ausente en varios entrenamientos por su reciente paternidad, comenzaba el duelo desde el banquillo. La propuesta no le salía mal al técnico gallego. Tras unos minutos igualados, los azulinos se hacían con las riendas del choque con un juego más fluido que el de su rival  y con buenas transiciones, aunque algo lentas, defensa-ataque.
Así, y tras una acción en la que Mahanan evitaba enviando a córner un remate de Chaco, Nacho Aznar centraba un balón desde la derecha que Plata cabeceaba fuera por poco. Al filo del cuarto de hora Sufian enviaba desde el flanco izquierdo una pelota a la espalda de los centrales que Plata remataba con la derecha por encima del travesaño. La réplica no se hacía esperar y en la jugada siguiente era Chaco el que, libre de marca en el segundo palo, cabeceaba mansamente a las manos de Dani Barrio un balón centrado desde la izquierda por Mena.

Partido bonito
El partido dejaba de ser de ida y vuelta en el momento que Nando, David Sánchez, Sufian y David Vázquez decidieron dar más pausa al juego a la hora de elaborar las jugadas de ataque. Sufian estuvo a punto de hacer el primero al recoger un rechace de la zaga visitante, pero su potente disparo lo despejaba con el pie Bocanegra.
Pasada la primera media hora, David Sánchez realizaba un espectacular cambio de orientación hacia la derecha donde Sufian controlaba y dibujaba un centro al área que acababa con el cuero en los dominios de David Vázquez, quien enganchaba una volea que no lograba su objetivo tras despejar un defensor a saque de esquina.
 En pleno acoso local, un despeje de la defensa aurinegra lo prolongaba Iván hacia atrás para que Chaco se presentara algo forzado ante Dani Barrio, pero el disparo del artillero lepero se estrellaba en el lateral de la red.
El Melilla, que no se conformaba con el empate, tocaba arrebato y de nuevo ponía cerco al área visitante. Sufian diseñaba un perfecto pase interior que dejaba a Nacho Aznar solo ante Bocanegra, pero el delantero melillense pecaba de generosidad y en lugar de disparar a puerta optaba por centrar atrás sin llegar a entenderse con Plata, que no leía bien la jugada y el balón se paseaba por el área de meta sin encontrar rematador ante la desesperación de los aficionados, quienes despedían con aplausos al equipo cuando el colegiado decretaba el descanso.

Segunda parte
La segunda parte se iniciaba de la mejor manera posible para el equipo norteafricano, que tomaba ventaja en el marcador en una acción sin aparente peligro. Una pelota colgada sobre la frontal del área, acababa con un choque fortuito entre el meta y un defensor del San Roque. David Sánchez se hacía con el rechace y desde la corona del área remataba a puerta vacía y establecía el 1-0 en el electrónico. Tras el gol, el choque estuvo parado al menos durante cinco minutos ya que Bocanegra quedaba tendido sobre el césped como consecuencia de la jugada, necesitando asistencia médica.
El Melilla daba un paso atrás y el San Roque pasaba a llevar la iniciativa, aunque sin ejercer un dominio apabullante. Una falta botada por el ex azulino Nico Cháfer se paseaba por el área de meta sin encontrar rematador y un poco después un saque de banda acababa con un remate de chilena de Iván que Dani Barrio, atento y bien colocado, atajaba sin problemas.
Entre medias, Currás decidía sustituir a David Vázquez por Chupe. El autor del gol se marchaba con el reconocimiento de la grada, que despedía al madrileño con muchos aplausos. Además, el técnico unionista se veía obligado a cambiar a Sufian por unas molestias, dando entrada a Borja López en el medular.
Borja López tuvo en sus botas el que hubiera sido el gol de la tranquilidad. David Sánchez botaba una falta desde el vértice izquierdo del área, Plata en el segunda palo cabeceaba hacía atrás y la pelota llegaba al canterano quien disparaba ajustado al palo derecho con la mala suerte de que un defensor despejaba sobre la misma línea de gol.
Ya en la recta final del choque, Nacho Aznar disfrutaba de un par de ocasiones de las que no sacaba provecho por falta de frescura. Y cuando parecía que los tres puntos se quedarían en casa, llegaba el mazazo de los visitantes en la prolongación. Primero, en el 94, Dani Barrio tuvo que emplearse a fondo para despejar a córner un cabezazo de Bonaque al saque de una falta lateral. Después, al saque desde el banderín de córner, el meta local realizaba una espectacular parada para evitar que el cabezazo de Bonaque acabara en el fondo de la red, pero el rechace del arquero lo aprovechaba Iván para conseguir la igualada.
El próximo compromiso de la escuadra de nuestra ciudad será frente a uno de los conjuntos recién ascendidos al grupo IV de la Segunda División B, el Linares Deportivo, a domicilio.