El rey Juan Carlos I concede la Enseña Nacional al colegio La Salle El Carmen. Gracias a la labor de la Comandancia General de Melilla, la bandera será entregada en un solemne acto el próximo 7 de abril.
Fue en 1912 cuando los Hermanos de La Salle llegaron por primera vez a Melilla y decidieron abrir un colegio que respondiera a las necesidades de centros educativos en una ciudad que carecía de los mismos.
Cuando los Hermanos llegaron a Melilla se encontraron una ciudad en plena expansión social y económica. Había en ese momento entre 25.000 y 30.000 habitantes pero muy pocas escuelas y un solo colegio de secundaria regido por militares. Tras la llegada de los primeros hermanos el 9 de mayo, sería el 16 de julio, día de la Virgen del Carmen, cuando se alquilaría un edificio en la calle O’Donell para el colegio.
El 1 de septiembre de 1912 abrió sus puertas el colegio y al mes prácticamente ya contaba con 200 alumnos. Pronto el colegio se quedó pequeño y en 1916 se adquiere un solar en el Cerro de Santiago donde se edificaría el colegio actual que se inauguró en 1918. Este edificio fue construido por Emilio Alzugaray, uno de los más importantes representantes del modernismo en la ciudad. Desde entonces, el Colegio de La Salle ha educado a miles de melillenses que han pasado por sus aulas en estos cien años.
La Bandera
El 21 de julio se produjo “El Desastre de Annual”, que puso en serio peligro a la ciudad de Melilla. También, como es lógico, afectó al colegio de La Salle, hasta 182 alumnos perdieron a su padre.
Los hermanos lasalianos reaccionaron de forma generosa y ofrecieron el colegio para hospital. La Cruz Roja estableció en él 300 camas. Además, los hermanos se dedicaron a la labor de enterrar a los muertos en los cementerios de Monte Arruit, Zeluán y Melilla. Los alumnos tuvieron que trasladarse a un edificio de la calle Actor Tallaví, hasta que la situación se normalizó.
El rey Alfonso XIII quiso agradecer a los Hermanos su labor y en 1929 obsequió al colegio con una bandera, bordada por la Infanta Beatriz. Esta bandera se entregó en un solemne acto que se celebró en el parque Hernández.
Esta bandera se perdió en el transcurso de la azarosa historia de la ciudad y era un anhelo de toda la comunidad educativa recuperarla.
Aprovechando la preparación del Centenario, se recurrió a la Comandancia General con ese fin. El comandante general de Melilla, César Muro Benayas, prestó todo su apoyo y finalmente, la bandera ha sido concedida por el rey Juan Carlos I y será entregada en un solemne acto el próximo 7 de abril.
Centenario
Esta entrega de la Bandera será el primer acto de celebración del centenario, para el que se está elaborando un programa variado y que pretende abrirse a toda la ciudad de Melilla y en donde la Ciudad Autónoma con su presidente a la cabeza y a su vez, antiguo alumno, Juan José Imbroda, se han volcado con el centenario de este colegio, un auténtico emblema en la ciudad.
Se comenzará con un acto inaugural y la presentación del cartel premiado (cuyo plazo finaliza el 20 de mayo) y que se celebrará en el mes de octubre en el teatro Kursaal.
En diciembre se colocará una placa en la sede del Antiguo Colegio, en la calle O’Donell, en enero, ya empezado el año del centenario, se realizará una semana dedicada a los alumnos con teatro, exposiciones y talleres que aprovecharán la historia del Colegio para profundizar en la historia de la ciudad y los cambios sociales que se han producido en este siglo.
Durante los meses de febrero y marzo se tiene previsto realizar la presentación de un libro sobre la historia del colegio y también celebrar una Eucaristía solemne de Acción de Gracias.
Con el buen tiempo, recibiremos a más de 500 escolares de otros colegios de La Salle de Andalucía que competirán en los Juegos de la Amistad que por primera vez se celebrarán en Melilla. En mayo, coincidiendo con la festividad de San Juan Bautista, se celebrarán los tradicionales juegos de ‘Azules y Amarillos’ y además, está prevista la inauguración de una estatua de San Juan Bautista en la Plaza del mismo nombre.
También se está preparando una exposición fotográfica con los fondos del colegio que pretende ser un reflejo de la enorme historia y el gran patrimonio humano del centro. Como colofón y durante el mes de junio se celebrará el Día del Antiguo Alumno, en el que se pretende reunir a un gran número de antiguos alumnos de las diferentes épocas y celebrar un acto académico para después, poner el colofón con una verbena, seguro que cargada de reencuentros y nostalgia.
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