Según el secretario de la UGT local, que anima a secundar el paro general. El Secretario General de UGT-Melilla pidió ayer "un esfuerzo" a los trabajadores para que acudan "masivamente" a la huelga y señaló que recorrerán hasta ese día hasta el último sitio donde haya una empresa con trabajadores en la ciudad. "Vamos a llegar hasta el tuétano de los centros de trabajo” para que los trabajadores "sepan que España con esta política está corriendo un riesgo cierto de que las jóvenes generaciones tengan menores derechos laborales y menores garantías de trabajo" además de "peores y más tardías condiciones de jubilación" que los trabajadores de edad madura.
"Corremos un riesgo muy serio”, insistió el ugetista, “de que en España se rompa esa escala ascendente de progreso de las clases trabajadoras de los últimos 30 años, que se ha producido por el esfuerzo de varias generaciones, que fueron capaces de luchar a favor de la democracia y del progreso".
Y es que, según Alonso Díaz, "la reforma laboral convierte en papel mojado la Ley de Economía Sostenible", dado que las medidas diseñadas por el Gobierno de Zapatero para "salir de la crisis económica y para avanzar en la recuperación económica" suponen "el camino del abaratamiento de los costes del factor trabajo".
También criticó que se pretenda retrasar la edad de jubilación a los 67 años y cuestionó si “el Gobierno va a poder garantizar un puesto de trabajo hasta los 67 años, porque la realidad es que hoy por hoy no se garantiza ni tan siquiera a los 65 años". “El Gobierno –razonó- está planeando quitar del medio mecanismos de rejuvenecimiento de las plantillas españolas; los trabajadores en edad madura sustituidos por jóvenes, hasta eso lo quieren quitar".
Asimismo, destacó que la intervención del presidente del Gobierno en el debate del Estado de la Nación muestra "la consumación del cambio de estrategia" de las políticas sociales del Ejecutivo, ya que "ha vuelto a enganchar el tema de la reforma laboral" en su discurso y a "insistir en el desplazamiento de la edad de jubilación". Por ello, aseguró, la huelga general convocada para el 29 de septiembre "se hace más legítima si cabe".
El dirigente ugetista melillense comentó por último que le "gustaría que el Parlamento le frenara los pies al Gobierno" para "al menos, echar para atrás el retraso en la edad de jubilación y la congelación de las pensiones contributivas". De esta forma, aseguró, se conseguiría "restaurar el Pacto de Toledo, que ha roto el Ejecutivo".