Los agentes creen que Francia era el destino de todos esos animales, que viajaban ocultos camuflados en el interior de tres turismos inspeccionados en la frontera y en el embarque. Varias personas han sido denunciadas en los últimos días como autoras de infracciones de contrabando al ser sorprendidos en la frontera o en el control de embarque con animales protegidos que pretendían llevar ocultos a la península. Los agentes de la Guardia Civil han recuperado en estas intervenciones un mono macaco, cuatro tortugas moras y un lagarto de cola del palmera. El probable destino de todos ellos, incluidos en el catálogo de especies protegidas, era Francia, donde tienen su lugar de residencia los presuntos infractores.
La primera intervención, desarrollada dentro de la Operación Paso de Estrecho, tuvo lugar el pasado domingo en el puerto. Ese día, los agentes que procedían al registro selectivo de vehículos que realizaban el preembarque del buque con destino a Almería, descubrieron el primero de los animales en un vehículo Audi A5. El turismo, de matrícula francesa, transportaba una mochilla pequeña y en su interior había un animal. Al inspeccionar el equipaje los agentes descubrieron que dentro había un mono macaco, también conocido como ‘mono de berbería’. El animal, un macho, sólo tenía unos meses de edad y se encontraba atemorizado, “posiblemente por el espacio tan reducido y oscuro en el que lo transportaban”, señala en su nota de prensa la Guardia Civil. Los agentes le ofrecieron agua y alimento y el animal recuperó “su agilidad y comportamiento”, indican los agentes.
Este primate es el único que vive fuera de Asia. Se le puede localizar en libertad en algunas zonas concretas de los montes Atlas del norte de África o en el peñón de Gibraltar, precisamente por este motivo también es conocido como ‘mono de Gibraltar’.
Un lagarto y cuatro tortugas
En los dos días siguientes, los pasados lunes y martes, agentes destinados en el paso fronterizo de Beni-Enzar hallaron en dos vehículos procedentes de Marruecos otros animales protegidos. En ambos casos los automóviles portaban matrícula francesa y habían utilizado el mismo receptáculo para ocultar los especímenes que pretendían introducir de contrabando. Los agentes encontraron bajo el asiento trasero una ‘jaula’ que contenía un ejemplar de lagarto de cola de palmera. En ese mismo lugar, pero en el otro coche había una caja de cartón con cuatro tortugas moras. En ambas intervenciones los animales recuperados pertenecen a especies protegidas por la normativa nacional y comunitaria.
En cada una de las intervenciones, los portadores de los animales han sido denunciados como supuestos autores de infracciones de contrabando ya que no pudieron aportar la perceptiva documentación sanitaria y reglamentaria que deben poseer tanto para su transporte como para su tenencia. Por ello se levantó el correspondiente acta de infracción e intervención al tratarse de animales protegidos por el Convenio Internacional contra el Tráfico de Especies Salvajes (CITES), suscrito por España y que incluye unos 6.000 animales y unas 13.000 plantas en peligro de extinción.
En estos casos los agentes, tras la intervención, ponen los animales a disposición del Servicio de Protección de la Naturaleza. Los funcionarios, tras comprobar el estado de los especímenes, desparasitarlos y alimentarlos, los dejan a su vez a disposición de los Servicios de Aduana, que es la autoridad competente para determinar el lugar para su depósito.