La intervención se produjo en las instalaciones del Puerto de la ciudad durante la madrugada del pasado domingo hallándose la droga en el techo de una furgoneta.
Agentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla pertenecientes a la Sección Fiscal del Muelle y del Servicio Cinológico, en su función de Resguardo Fiscal del Estado,realizaron durante la madrugada del domingo pasado, una importante aprehensión de drogas en el Puerto de la ciudad.
El hallazgo se produjo durante los registros que se llevan a cabo en las instalaciones portuarias antes del embarque de los vehículos a los buques con destino a la península.
La actuación, a través de la que se lograron incautar 219,600 kilogramos de ‘polen de hachís’, se realizó sobre una furgoneta que embarcaba con destino al puerto de Almería.
Tras un minucioso reconocimiento del vehículo, se localizó en un doble fondo muy bien construido y hermético, perfectamente camuflado esta cantidad de droga.
Después de una rotura parcial, los agentes de la Benemérita procedieron a abrir por completo el techo de la furgoneta para contabilizar un total de “93 paquetes de droga”, de diferentes formas y tamaños.
El único ocupante del vehículo, su conductor, es un hombre de nacionalidad marroquí que atiende a las iniciales E.M.E.B y con domicilio en Bélgica, posible destino de la droga intervenida.
El conductor de la furgoneta, sin ninguna vinculación con la ciudad, ha sido puesto a disposición judicial como presunto autor de un delito contra la Salud Pública en unión de la droga intervenida y del vehículo en el que se transportaba oculta.
Esta actuación se une a las distintas intervenciones que viene desarrollando este Cuerpo de Seguridad del Estado en las distintas instalaciones destinadas al transporte de viajeros, tanto en el Puerto como en el Aeropuerto.
A estas intervenciones se le tiene que sumar aquéllas derivadas de la ‘Operación Retorno’ de la ‘Operación Paso del Estrecho de este año’, además de las que se ocasionen con motivo de la celebración de las fiestas patronales, estando atentos, sobre todo en el momento en el que regresen los feriantes.