Es el resultado de cuatro intervenciones realizadas en el puerto de Melilla en el control a los vehículos y pasajeros que embarcan con destino a la península. La Guardia Civil de Melilla ha intervenido un total de 40 kilos de droga en el transcurso de cuatro operaciones llevadas a cabo en el puerto de la ciudad, con motivo de los controles que se realizan durante el embarque de vehículos y pasajeros a los buques con destino a la península.
También como fruto de estas intervenciones, los agentes detuvieron a cuatro personas, todas ellas como presuntas autoras de delitos contra la salud pública.
Según el comunicado de prensa remitido por la Comandancia de la Guardia Civil, la primera de estas cuatro actuaciones tuvo lugar en pasado jueves día 8, cuando los agentes detectaron en un doble fondo practicado bajo el suelo de un vehículo que trataba de embarcar con destino a Almería seis kilogramos de hachís.
Como resultado de esta intervención, fue detenido el conductor y único ocupante del vehículo, F.C.L., español de 41 años de edad y residente en Huelva.
El día 9 tuvieron lugar dos actuaciones más, durante el servicio de control a vehículos que embarcan hacia la península, y de nuevo, teniendo como destino ambos, Almería.
En uno de los coches la droga, 10.900 kilos, iba oculta en los neumáticos de las ruedas, mientras que en el segundo, la droga fue detectada en un doble fondo practicado bajo suelo del asiento trasero, un total de 23,700 kilos de resina de hachís.
En esta segunda jornada también fueron detenidas dos personas, los conductores y únicos ocupantes de los dos vehículos de matricula nacional.
En concreto, y según la nota, se trata de Y.B., de 46 años, de nacionalidad marroquí y vecino de Málaga y de M.E., también marroquí, de 20 años y vecino de Melilla.
La última actuación tuvo lugar también el día 9, aunque en esta ocasión durante el embarque de pasajeros. Así, en el control del equipaje de mano que llevan los pasajeros, el scanner de rayos X del vigilante de seguridad observó a través de los monitores unos cuerpos extraños en forma de pastillas, motivo por el cual, tras avisar a los agentes de la Guardia Civil, se realizó un reconocimiento más exhaustivo. Éste dio como resultado que a los largueros del equipaje le habían sido adheridas, con cinta de color marrón, cinco pastillas que resultaron contener un kilo de resina de hachís.
Los agentes procedieron por tanto a la detención de H.M.G., otro joven de 20 años, español y también residente en Melilla, que pretendía embarcar en el buque con destino a Málaga.