La Guardia Civil cuenta con dos nuevas lanchas para realizar salvamentos

Las embarcaciones también servirán para luchar contra mafias que se aprovechan de los inmigrantes

El delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, y el coronel jefe de la Guardia Civil de Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, estuvieron ayer en el acto de presentación y recepción de dos nuevas embarcaciones, una rígida con cabina e insumergible y otra semirígida tipo zodiac, para el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS). Ambas tienen un valor de unos 600.000 euros y han sido financiadas por el Fondo Europeo para las Fronteras Exteriores, apuntó el delegado del Gobierno.
El Barkani destacó que estas dos embarcaciones refuerzan los recursos materiales de la Guardia Civil y mejorarán la capacidad de actuación del GEAS, que “ya es buena”. El año pasado esta unidad hizo 73 salvamentos marítimos.
“No sólo servirán para vigilar las fronteras acuáticas marítimas en cuanto a la inmigración clandestina, sino también para cualquier otra función de la Policía Judicial y lo que es más importante, para el salvamento marítimo”, destacó el delegado del Gobierno, que además insistió en que espera que estas dos embarcaciones ayuden al servicio del GEAS a mejorar en su labor en el mar.

Colaboración de Europa
Asimismo, El Barkani aseguró que se alegra “muchísimo de que Europa se preocupe también por mejorar los recursos materiales que ayudan a conseguir esos objetivos”, en referencia a que estas nuevas embarcaciones han sido financiadas por el Fondo Europeo para las Fronteras Exteriores, en su Programa de Solidaridad y Gestión de Flujos Migratorios.
Las dos son de construcción nacional y una vez equipadas, tienen un coste de unos 600.000 euros apuntó ayer la Comandancia de la Guardia Civil, en un comunicado, en el que puntualiza que han sido cofinanciadas por los fondos europeos, aunque no indica qué otra entidad cubre los gastos de compra de estas lanchas, supuestamente , el Ministerio del Interior.
Por su parte, Martín Villaseñor resaltó que el GEAS cuenta con un total de 20 guardias civiles, entre los que hay varios mandos, que están a disposición si es necesario realizar un salvamento o llevar a cabo una labor de apoyo en el medio marítimo. También indicó que estas dos embarcaciones nuevas irán sustituyendo a las dos que hasta ahora tenía esta unidad de la Guardia Civil, “que pasarán a mejor vida”. Resaltó que tanto la embarcación rígida con cabina como la semirígida cubren las demandas de los servicios que realiza el GEAS en Melilla.

Una madrina
Además, se llevó a cabo un breve acto en el que el padre Francisco Sierra, de la iglesia de la Castrense, bendijo a las dos embarcaciones y la hermana Mercedes Moraleda, directora del centro que tiene la congregación de María Inmaculada en el Monte María Cristina, amadrinó al barco más grande. Moraleda se subió a esta embarcación y con fuerza rompió una botella de sidra en la popa.
La hermana indicó que participaba en esta actividad en nombre de su comunidad y apuntó que en un principio las religiosas no entendían muy bien qué tenían que ver ellas con ese tema. No obstante, explicó que cuando le dijeron que la embarcación serviría para el rescate y el salvamento de personas, sí que vio esa relación directa con la misión que tienen las hermanas de María Inmaculada en la ciudad. “Nosotras intentamos rescatar de la pobreza de una manera integral a las personas que van al centro”, señaló.
“Estamos en el mismo barco”, resaltó Moraleda porque añadió que las instituciones públicas y otras entidades, como su congregación, forman “una cadena de bien en el que cada uno aporta una parte para ayudar a los más necesitados”.
Moraleda insistió en que mientras las religiosas van a apoyar a las personas sin recursos para intentar rescatarlas de la pobreza, la Guardia Civil usará estas embarcaciones para salvar a personas en peligro. “Nos queda pedir a Dios que estos barcos cumplan con su deber de salvación de las personas y que aquéllos que las dirijan no lo olviden”, añadió. 

Una de las embarcaciones cuenta con una cabina, es rígida e insumergible y se estima que su valor es de unos 500.000 euros. Ha sido construida de forma específica para esta unidad. Tiene una eslora de 8,50 metros por 2,80 de manga, dos motores y alcanza una velocidad de 45 nudos y de 25 nudos si es de crucero. Se encuentra completamente equipada con rádar, teléfonos satélite y convencional, GPS, sonda, Naxtev, identificación vía satélite de embarcaciones, y además cuenta con ‘pescantes de rescate’, para abordar con garantías los auxilios de personas en el mar. La incorporación de esta embarcación a la Guardia Civil ha sido muy demandada y supone “un salto cualitativo muy importante para el servicio”, ya que por sus características puede colaborar en los rescates de embarcaciones en peligro hasta las 40 millas, cubriendo de esta forma, si se requiere,  gran parte del Mar de Alborán y Peñones, destacó la Comandancia de la Guardia Civil en un comunicado.
La otra embarcación es una semirrigida tipo zodiac. Está equipada con dos motores, lo que le confiere “una alta capacidad de maniobra y velocidad”. Viene equipada con arco de luces, equipamiento policial y de navegación. Su coste asciende a unos 84. 000 euros, apuntó la Guardia Civil.